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Te lo contamos todo sobre X-Men Días del futuro pasado
Curiosidades, argumento, cómics en los que se inspira...
Días contados quedan para que los X-Men lleguen de nuevo a los cines de todo el mundo. La peli queda en manos de Bryan Singer; el responsable de las dos primeras entregas de los mutantes en la gran pantalla, dejando como excepción la tercera entrega de la serie (bastante desastrosa) y Primera Clase (mucho más acertada, pero en manos de Matthew Vaughn), así que bien podríamos estar hablando del regreso del hijo pródigo.
Días del futuro pasado
Recuperar los años mozos de los mutantes en Primera Clase fue una de las mejores decisiones que haya podido tomar la productora por estos personajes. Cuando las ideas y los personajes se repiten hay que tomar medidas y retrodecer en el tiempo hasta los orígenes de la comunidad mutante no pudo funcionar mejor.
Esta nueva Días del futuro pasado, sigue los eventos del cómic homónimo creado por Chris Claremont y dibujado por John Byrne allá por el año 81. La historia retrata un futuro en el que la incesante guerra entre "buenos" y "malos" ha terminado con las peores consecuencias. Los Estados Unidos sucumben al control de una fuerza opresora mayor y los pocos mutantes que quedan con vida viven en campos de concentración bajo la constante vigilancia de unos enormes robots conocidos como Centinelas.
Xavier y Magneto, que no son de fácil acuerdo, deciden cambiar la situación resolviendo el problema donde empezó; el pasado. Para ello se valen de vuestro inmortal favorito, Lobezno, que visitará una fecha concreta de la línea temporal para impedir que cierto acontecimiento tenga lugar.
La idea es no contar más porque la peli está al caer y no queremos que pierda su gracia después de tanto esperar. Partiendo de lo visto en el tráiler no podemos asegurar rigurosa fidelidad para con el tebeo. En la historia original no era Lobezno quien viajaba en el tiempo, pero en el cine hay que aprovechar a Hugh Jackman mientras tenga los músculos en el sitio, que este no es inmortal.
La era del apocalipsis
También deja entrever ese avance pequeños destellos de la historia de La era del apocalipsis, cómic posterior a Días del futuro pasado y con el desaguisado temporal en común, por el que Bryan Singer ha firmado también para llevar a la gran pantalla dentro de un par de años.
Pero la mayor de las curiosidades la encontramos en la guerra de propiedad intelectual que mantienen Sony, Fox y Paramount por los diferentes superhéroes de Marvel. Como sabréis, los vengadores (Ironman, el capi, Thor, Hulk and company) son propiedad de Paramount cuando hablamos de cine; Sony sólo tiene a Spider-Man en catálogo y Fox tiene a los X-Men en su poder. Pues bien, resulta que la tirantez llega hasta un punto en el que Paramount no puede siquiera mencionar la palabra mutante en sus películas. Es decir, los universos de las tres compañías no pueden co-existir ni siquiera en palabra.
Tanto es así que la segunda parte de Los Vengadores presenta a los personajes de Mercurio y Bruja Escarlata, cuyo origen reside en los cómics de X-Men, y la compañía tiene prohibido decir que son mutantes y/o hijos de Magneto, siempre prota en las pelis de Fox. De hecho X-Men Días del futuro pasado también presenta a Mercurio en su película con diferente actor y, presumiblemente, diferente historia.
Qué poco costaría que todos se pusieran medio de acuerdo para dar forma a un único universo Marvel. Sería genial que las pelis se lanzaran guiños entre sí y que pudiéramos ver cruces entre facciones sin la necesidad de que decenas de abogados se lanzaran a morder las yugulares. Los que hayáis visto Spider-Man 2, y hayáis aguantado hasta el final de los créditos, ya os habréis dado cuenta de que no es algo imposible; pero aún así no ha tardado en desmentirse que esa colaboración vaya a ir a más que un simple guiñito entre universos.
En fin, que los mutantes vuelven al cine, que llegan dirigidos por alguien que les ha hecho brillar en cuatro películas y que, aunque fraccionado, el futuro de Marvel en la gran pantalla es tremendamente próspero. Esperemos que DC haya tomado nota y que no se pase de la raya en su proyecto Batman VS Superman, que lo más difícil es construir los cimientos y parece que DC quiere empezar la casa por el tejado.