¿Qué fue de Gotye?

No ha vuelto a superar el éxito de Somebody that I used to know pero sigue haciendo cosas

En 2011 Gotye se hizo mundialmente conocido por su canción Somebody that I used to know. Y aunque poco más supimos de él tras el éxito de ese tema, el belga-australiano, sigue en activo aunque con menos repercusión.

Desde muy pequeño mostró su pasión por la música y aprendió a tocar el piano y la batería. Siendo un adolescente montó Downstares, una banda que compartía con un amigo que, aún hoy en día, le sigue acompañando en sus directos. Pero aquello acabó y en 2001 Gotye grabó por su cuenta sus primeras canciones utilizando samples. Hizo 50 copias caseras que mandó a discográficas y estaciones de radio. Lo firmó como Gotye, su versión de Gaultier, la traducción al francés de su nombre real, Wouter. Al mismo tiempo montó la banda The Basics con la que continúa trabajando y con la que ha grabado ya cuatro discos.

El interés por su música fue creciendo hasta que en 2003 logró publicar su primer disco, Boardface. No tuvo demasiada repercusión pero le sirvió para poder publicar un segundo trabajo, Like drawing blood, con el que consiguió que se le empezar a tomar en consideración y le proporcionó sus primeros premios.

Eso sí, el éxito internacional le llegó con su tercer trabajo, Making mirrors, que grabó en la granja de sus padres. En ese disco estaba Somebody that I used to know junto a la artista neozelandesa Kimbra. En seguida recibió el apoyo, vía twitter, de Ashton Kutcher y Lily Allen. Los interesados en la canción se empezaron a multiplicar por millones y consiguió ser nº1 en 46 países a lo largo de 2011.

Tras aquel tremendo éxito poco hemos oído hablar de él pero no ha dejado de hacer cosas. En 2012 se embarcó en una gira mundial. A su vuelta se interesó por proyectos de corte artístico como Fractured heart, una escultura de luz y sonido interactivo que inauguró, el año pasado, en el Archivo Nacional de Cine y Sonido de Cranberra.

Además, se ha embarcado en un proyecto visual que recoge el trabajo de sus animadores favoritos incluyendo a los que han trabajado con él en sus vídeos Hearts a mess, Easy way out o State of the art.

De momento no tiene proyecto de sacar nuevo disco como Kimbra, que sigue haciendo cosas nuevas, pero seguro que seguirá dedicado a la música y el arte aunque más centrado en su país.