"Madrid es una ciudad muy pervertida"

Pillamos a Adriana Torrebejano en un descanso del rodaje. No parece estar cansada, aunque rodar en una serie diaria agota a cualquiera. El ritmo, como ella misma nos cuenta, es frenético. Adriana interpreta a Bea en la serie diaria de Cuatro, Ciega a Citas que esta semana ya ha celebrado su episodio número 100.

De su personaje nos dice que es muy alocada, que no para quieta y que tiene mucha energía. Adriana es algo menos inquieta. Posee la misma energía que su personaje en la ficción de las tardes de Cuatro, pero la canaliza de otra manera. En esta entrevista nos acercamos un poco más a esta chica de 22 años a la que no hace mucho también la pudimos ver en otras dos series de Mediaset: Hospital Central y Tierra de Lobos, ambas en Telecinco.

Y ojito con Adriana, que apunta maneras para dar el paso a la política. Eso sí, la música de su campaña electoral seguro que correría a cargo de Calle 13.

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¿Es agotadora una serie diaria?

Son muchas horas, pero siempre hay momentos en los que uno puede descansar. Se suele hacer ameno porque ya somos como una familia. Ahora estamos aquí, en unos sofás tumbados unos cuantos hablando…, porque en las secuencias que se están grabando ahora nosotros no salimos.

Sí, como una familia, pero con todos los fichajes e incorporaciones de actores que hace Ciega A Citas, cada poco tiempo diréis "¡Anda, uno nuevo!"

Sí, eso es muy gracioso porque cada semana hay gente nueva. Siempre son amigos porque en esto nos conocemos prácticamente todos así que deseas que te toque alguna secuencia juntos. Es divertido que venga tanta gente, es como que mueve mucho la energía.

Para que lo entiendan quienes nos estén leyendo, ¿qué diferencia de curro hay entre una serie que emite un capítulo a la semana y esta que emite cada tarde uno?

Cambia mucho. Las jornadas de rodaje son distintas y el horario laboral también. En una semanal se graban muchísimas menos secuencias al día, menos minutos de montaje. En una diaria se graba más del doble. Vas a un ritmo frenético para acabar el capítulo.

Para que te hagas una idea, en una semanal puedes hacer 4 ó 5 secuencias en un día y en Ciega a Citas estamos haciendo entre 12 y 14 secuencias.

Y con este ritmo, ¿cómo ves la serie? ¿Te da tiempo?

[Ríe] En directo nunca la puedo ver porque siempre estoy aquí en el rodaje. Pero como tengo el iPlus, la grabo automáticamente. Lo tengo programado. Luego los fines de semana, si quiero ver algo en concreto, la busco y la veo.

¿Y qué otras series dejas programadas en el iPlus para que se graben? ¿De qué series eres fan?

Pues acabo de terminar la nueva de 'Juego de Tronos' y la de 'Vikingos'… y estoy con ansiedad [ríe] porque quiero engancharme a otra en cuanto pueda. Suelo ver más series que películas, ahora mismo.

Por lo que veo te gustan las series de hombres fornidos, ¡eh!

[Ríe] Me gustan las series bélicas, de lucha… Me atraen mucho también las de época.

¿Eres guerrera?

Tanto como guerrera… [Ríe] Me gusta ver ese tipo de ficción más que algo más actual.

Y Bea, tu personaje en Ciega a Citas, que ha revolucionado un poco la vida de Irene y Rodrigo y parece que tiene ahí una tensión sexual no resulta con ambos… ¿Al final qué le gusta más, la carne [los chicos] o el pescado [chicas] o todo?

[Carcajadas] ¡Le gusta más el pescado! Es una chica muy abierta, tanto en su vida como sexualmente. Es una normal, del siglo XXI.

¡Ah! ¿Y tú crees que las chicas del siglo XXI son así, tan abiertas?

En este caso, Bea es una chica que representa ese lado y no tiene ningún problema a ser como es.

Y las que sí tienen prejuicios en la cabeza, las chicas de hoy en día que aún tienen tabúes… ¿tú que les dirías?

Pues que sean como ellas son, no hay que cumplir un prototipo de mujer, estés en el siglo que estés. Cada uno es como es y se expresa como quiere. Eso transmite el personaje de Bea: naturalidad, es muy expresiva y dice las cosas tal y como quiere.

Así es Bea, vale. ¿Cómo eres tú?

Bea y yo somos dos chicas bastante similares porque vivimos en la misma época y en un mundo muy liberal. Muchas cosas de las que piensa, también las pienso yo, obviamente.

Bueno, esto no me vale. No me vale que te definas ahí de esta forma tan abstracta "mucho de lo que piensa ella lo pienso yo, bla, bla, bla", ¿Cómo es Adriana Torrebejano? Eso es lo que en política es "hablar mucho y no decir nada".

[Risa] A ver, ella es una chica que no para, yo no soy tan culo inquieto. Eso te lo puedo asegurar [ríe]. Ella tiene su carrera, trabaja en un bar para sacarse un extra… No para. Es una chica muy activa, yo no lo soy tanto. Soy más de dedicarme más tiempo a mí misma. Me gusta ver una serie, leer un libro. Soy más casera y me gusta dedicar más tiempo para mí y para mi gente.

Tu personaje trabaja en un bar para sacarse un dinero extra. Tú, además de trabajar como actriz, ¿has tenido que trabajar en alguna otra cosa rocambolesca para sacarte un dinerillo?

¡Sí! La mayoría de actores de este país han trabajado de todo para poder pagarse los estudios de interpretación o gastos varios. Yo creo que todos hemos pasado por camareros, teleoperadores… En rachas donde no te salen series, yo he trabajado de camarera, de peluquera, de teleoperadora… He trabajado de todo para poder hacer lo que más me gusta.

¿Sabes cortar el pelo?

¡No! Estuve en una peluquería, pero como no sabía nada y estaba empezando era más ayudar y poner tintes. No podía hacer nada más porque no tengo estudios de peluquera [ríe]

La serie se centra en torno a un programa de radio ¿tú has llamado alguna vez a algún programa de radio a contar alguna experiencia?

Mira, no fue a una radio. Pero fue parecido. Tenía que prepararme para una obra de microteatro que iba sobre líneas eróticas y mis dos amigos y yo que estábamos involucrados en el proyecto, tuvimos que llamar a una línea erótica para poder conocer un poco más todo esto para poder escribirlo, interpretarlo y dirigirlo. Fue muy, muy divertido.

A la radio nunca he llamado, la escucho, pero no he llamado.

Ahora que has hablado de teatro: vamos a hacer un ejercicio. Yo te voy a poner sobre la mesa títulos de obras en las que tú has participado y me dices qué sería para ti ese título en tu forma de entender la vida. Por ejemplo, tu última obra ha sido La Vida Resuelta. ¿Qué es para ti tener la vida resuelta?

Pues creo que eso nunca se puede tener porque si no sería muy aburrido. Siempre vas intentando escalar, ser un poco ambiciosa… Una vez que consigues una cosa, vas a por otra.

Otra obra: Perversiones Sexuales en Chicago. ¿A qué ciudad te irías para dejarte pervertir o para pervertir a alguien sexualmente?

Madrid es una ciudad muy pervertida [risas].

¿Ah sí? ¿Por qué?

Para mí, Madrid es una ciudad que lo tiene todo: tienes trabajo, se puede vivir muy bien, tienes ocio de lunes a domingo y es una ciudad muy cómoda por lo menos para alguien de mi edad.

Otra obra: Los Que Besan Bien, ¿cómo debe ser un buen beso?

Depende el momento: hay besos para todo porque hay momentos para todo.

Tú tienes que dedicarte a la política eeem…

Sí, ¿no? [Risas]

De todas las series por las que has pasado, ¿de cuál es la que guardas un mayor recuerdo? ¿Cuál es esa serie de la que te sientes muy orgullosa de haber participado?

La que siempre me provoca una sonrisa es Hospital Central. Es una serie con la que he crecido, viéndola, y siempre quise participar en ella. Y tuve la oportunidad, primero, de participar como episódica durante 3 capítulos y después, al cabo de los años, volví como fija y estuve dos temporadas haciendo de enfermera. Para mí fue como una recompensa.

Aprendí mucho, me lo pasé súper bien y creo que es la serie y el momento de mi vida que nunca olvidaré.

¿Con qué cantante o con qué grupo estaría bien cerrar esta entrevista?

Calle 13. Los escucho diariamente porque me dan muchísima energía. Los escucho para todo. Hace poco estuve en su concierto y me lo pasé genial. No hay grupo que me haga bailar más que ellos.