Jesús Castro: “Al segundo llegaría ya en pelotas”
El Niño nos habla de su primer desnudo en el cine y contesta nuestro cuestionario más hot
Jesús Castro debe de tener la agenda más apretada del país tras el estreno de El Niño, la película que le ha convertido en el chico del momento, para nosotros, en el pibón de la semana. Todo el mundo quiere verle, hacerse una foto con él y decirle lo guapo que es. Quedar con Jesús es estresante por todo lo que le rodea pero a él parece no afectarle, transmite mucha calma, de hecho, es muy pausado a la hora de hablar. “Es mi forma de llevarlo bien, la tranquilidad, si no, ya te digo que no lo llevaría tan bien como lo hago”, asegura.
En nada de tiempo ha pasado de ser un estudiante de electrónica que decidió hacer pellas para presentarse a un casting a galán de moda y por mucho que él muestre su humildad es difícil de creerle cuando dice que no se ve como el chico perfecto, “yo no me puedo permitir el lujo de creérmelo porque no me haría bien y aparte, yo no creo que sea el chico diez”.
Tiene sólo 21 años pero ya sabe lo que es trabajar. En su tierra, en Vejer de la Frontera, ha sido albañil, churrero, relaciones públicas de una discoteca, estudiante y ahora, actor, aunque tiene claro cuál es ha sido la etapa más difícil, “la construcción era dura porque era más pequeño y cuando en la obra aún no has hecho casa ni has hecho nada no hay sombras. Si hace 40º, tienes que estar a 40º con pico y pala. Después de hacer ese curro, valoras que lo demás no es tanto curro realmente”.
Convertirse en El Niño tampoco ha sido un camino de rosas, él mismo decidió hacer las escenas de acción sin recurrir a dobles, un punto kamikaze de su personaje, “Jesús Castro no se montaría en la embarcación esa ni de coña. Intentaba que quien se montara fuera El Niño y Jesús Castro se quedara en tierra, si no era complicado que lo hiciera porque a El Niño le gusta la adrenalina, la velocidad, pero Jesús Castro es más parado”.
Eso dice aunque no debe de ser tan parado cuando decidió conducir una lancha, una moto de agua y un Grand Cherokee sin tener carné de conducir, “había conducido pero para que no se te pare un coche, pero las maniobras que hice no las había hecho nunca”, explica como si nada, “ensayamos un poco unos días antes del rodaje y yo siempre decía que tiraba a la primera y si lo hacía mal para eso estaba el doble pero no se dio el caso y al final, de primera las tiré todas”.
Y si las escenas de acción fueron complicadas por el riesgo que conllevan, las de amor tampoco fueron sencillas. Jesús reconoce que la noche antes del rodaje de su primer desnudo no durmió casi nada, “llevarte una jornada de trabajo de 8 de la mañana a 9 de la noche en bolas, para ser tu primera vez, hostia…pero ya está hecho. Yo creo que al segundo llegaría al rodaje en pelotas, ya no me lo pensaría”.
El Niño ha sido su primera experiencia pero no la única, en unos días estrena La isla mínima, “veréis a Quini que no tiene nada que ver con El Niño, es más frío, más calculador, no mira sentimientos, es un cabroncete”. Es un papel más corto que supone la continuación de una carrera incipiente pero prometedora. De hecho, Jesús ya tiene nuevos proyectos de los que no puede hablar pero tiene claro que “tener cosas te da ganas de seguir aprendiendo y currando”.
Muchos darían por sentado que con una agenda tan completa y proyectos sobre la mesa, Jesús ya estaría buscando casa en Madrid pero nada más lejos, “vivo solo, no vivo con mis padres, vivo en Vejer de la Frontera y, de momento, no tengo pensamiento de irme de allí”. Ya veremos si el trabajo acaba haciéndole cambiar de opinión, de momento prefiere estar cerca de su familia entre los que están su hermano de 17 años y su debilidad, su hermana de 8.
En los últimos días hemos escuchado y visto a Jesús en todos los lados. Que El Niño haya tenido un debut en taquilla mejor, incluso, que 8 apellidos vascos, es por algo. No ha parado de hacer promoción y lo que le queda y aunque parece que ya lo ha contado todo hay todavía mucho por descubrir de este joven gaditano de mirada segura y maneras asombrosamente maduras para su edad. Parece que ningún tema es tabú para él que contesta a todo lo que le preguntas sin poner ninguna cara extraña. Ahí va la prueba, 21 años, 21 preguntas.
1. Aquella vez que te dieron calabazas…
Muchas veces me han dado calabazas.
2. Lo que cambiarías de ti
La mala hostia en algunos momentos determinados.
3. Las chicas que te gustan tienen en común…
No tengo un prototipo.
4. Un ritual de conquista
No tengo ninguno. Lo que intento es mirar a los ojos de la persona con quien hablo.
5. Lo que te hace sentir sexy
Que yo me vea y diga ‘hostia, qué sexy estoy’, no, pero si me visto un sábado y tal, sí te ves diferente. Con el rollo casual, cuando te arreglas te ves más guapete pero, sexy… no sé.
6. Un look que nunca falla
Pitillos y camisa de cuadros.
7. Lo que te dices frente al espejo
Vaya ojeras que tienes, últimamente es lo que digo.
8. Un vicio confesable
Redbull.
9. Lo más bonito que te ha dicho una chica
Que tengo los ojos del color del estrecho de Gibraltar
10. Lo más bonito que le has dicho a una chica
Ahora no me acuerdo, me tendría que meter en situación.
11. Un icono sexual
No tengo… me gustaba mucho Grace Kelly, era impresionante.
12. ¿Los chicos también lloran?
Claro que lloran, además que, es de hombre llorar.
13. La mejor enseñanza de tus padres
Siempre me han dicho que sepa de dónde vengo, lo que me han inculcado y acordarme de lo que ellos han pasado para darme el cuerpo y la cabeza que tengo. Si lo tienes siempre en cuenta no tienes por qué levantar ni la suela del zapato del suelo ni un momento. Yo siempre he sido el más pequeño con los amigos que me he juntado. Así que ahora, cuando con 21 buscas rollo discoteca, yo eso, ya lo pasé, voy por otra etapa.
14. Un deporte para desfogar
Fútbol. Desde que tengo uso de razón practico fútbol. Últimamente, hace unos meses que no puedo pero ni fútbol, ni gimnasio ni nada.
15. ¿Sexo sin amor?
Sí (duda). Sí, depende del momento, puede ser.
16. Una primera cita perfecta
Normal, una cenita, un buen almuerzo, cine… discoteca no, en una primera cita, discoteca, no.
17. Tu primera novia
Era de Conil y yo tenía como 14 años o así, la primera novia formal. Además estuve un buen tiempo, estuve como tres años o así.
18. El personaje al que te gustaría dar vida
No tengo un personaje claro pero dar vida a un superhéroe no estaría mal.
19. Un icono masculino
A nivel interpretativo, Luis Tosar.
20. Lo mejor de la fama
A mí lo que más me gusta es que la gente te demuestre su cariño, te apoye, te de ánimo.
21. Lo más extraño que te has visto haciendo en las últimas semanas
Ha sido todo porque yo no estaba puesto en reportajes fotográficos, ni en entrevistas, programas de radio, programas de televisión y ahora todo eso… bueno, lo haces y ya está. Al principio sí que estás nervioso pero ahora ya…
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...