Las braguitas de la Pedroche y el resacón televisivo
La Nochevieja en televisión dio para mucho… tanto que parece una gran resaca.
El efecto resaca: después de mucho ruido y mucho alcohol, al día siguiente uno no quiere ni verse. Así estamos ahora con la Nochevieja televisiva que hemos tenido. Las cadenas se engalanaron de fiesta para despedir el año, pero entre unas cosas y otras, ya llevamos 2 días de este 2014 y siguen coleando algunas de las emisiones de tan célebre fecha.
Es un resacón en toda regla el que nos ha dejado la Nochevieja televisiva. Vamos por partes.
La primera parada tiene que ser la televisión autonómica de Andalucía, Canal Sur: el error que dejó sin uvas a los espectadores que veían las campanadas por este canal (se coló un spot publicitario en mitad de las uvas) ya se ha saldado con la dimisión del director de Emisiones y con las infinidad de bromas en redes sociales.
La segunda parada: las braguitas de Cristina Pedroche en las campanadas. La colaboradora era la encargada de dar las uvas en laSexta junto a Frank Blanco y lució un vestido que dejaba ver casi todo. Pero para que pudiéramos verlo todo con mucho más detalle, ella misma se apartó los pliegues del vestido delante de la cámara con lo que pudimos ver las braguitas negras (monísimas) y un cuerpo apto para ponerse a pecar.
Además de todo lo que han dado que hablar (y ver) las transparencias de Cristina, hay que decir que en audiencia han tenido un gran éxito: laSexta ha batido su récord en unas campanadas y se situó como la tercera opción por detrás de Telecinco (segunda) y La 1 (líder).
También nos ha dejado resaca la gala de bienvenida del año nuevo de Telecinco. Si en Nochebuena saltó la polémica porque la actuación que María Toledo había grabado para la gala de esa noche no se había emitido, ahora es Verónica (de OT 1) la que se ha quedado sin ver su actuación en la gala de Nochevieja de Telecinco. Según cuenta ella, Telecinco le informó el mismo día 31 de que por problemas técnicos, no se podría emitir su actuación. Una gran decepción para la cantante que había estado promocionando su participación en esta gala en redes sociales durante los días previos.
Estas galas de Nochevieja, con mucho confeti, trompetitas, matasuegras, gorros… son lo peor, lo sabemos. Es como alcohol del malo: pueden original la peor de las resacas. Quedarse en casa en Nochevieja y tener que ver alguna de estas galas (propias de la televisión de los 90) es más que un castigo: actuaciones grabadas, playbacks, chistes malos, teatrillos de andar por casa…
Y lo peor de todo es la mezcla de estilos que se producen en estas galas: igual sale Kiko Rivera que aparece un bailaor flamenco o Miguel Bosé con un abrigo para esconder unos kilos de más. Todo muy bizarro.
Otro motivo de resaca televisiva por culpa de la Nochevieja son los programas de refritos. Si no queremos galas, cambiamos el canal y todo son refritos y programas de zapping con imágenes de archivo. Insufrible.
Así que, entre los que no pudieron comerse las uvas por estar viendo Canal Sur, entre los que se atragantaron por mirar las transparencias de la Pedroche en lugar del reloj, los que se les indigestó la cena con esas galas rancias de por la noche… Mejor que lleguen ya los estrenos televisivos de 2015 que hay muchos y son bastante más interesantes ¿no?