Melendi: “En las primeras giras sólo podía quedar uno, ahora somos padres de familia”

Este miércoles el Círculo de Bellas Artes de Madrid se llenó de guitarreo con las nuevas canciones de Melendi. Unos pocos afortunados pudieron disfrutar del asturiano en las distancias cortas gracias al Básico 40 Opel Corsa. Clásicos de su repertorio se mezclaron con sus canciones nuevas.

Nosotros nos colamos en las pruebas de sonido para hablar con él y saber cómo vive, desde que se levanta, un día de concierto.

Tendría nervios pero la gente salió encantada del concierto. Ahora le toca irse a Latinoamérica, para dos conciertos en Argentina y Chile, y volver para comenzar su gira española el 1 de mayo en Valladolid, “hemos trabajado mucho y tengo unas ganas de estrenarla tremendas”, asegura.

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Reconoce que antes le daba más pereza embarcarse en una gira pero que ahora le apetece bastante, “hemos preparado muchas cosas. Nos hemos dado cuenta de que con el paso del tiempo las giras se pueden hacer monótonas y que hay que darle una vuelta de tuerca para ofrecer algo diferente”. Y eso es lo que ha estado haciendo en las últimas semanas, crearle una nueva cara a sus viejas canciones.

Tiene una agenda llena de compromisos para los próximos meses y es que empezar una gira es duro, hay que prepararse físicamente para aguantarla, “casi todas las giras trato de ponerme a correr antes, en esta me estoy retrasando, pero a partir de la semana que viene empiezo a salir a correr”. Para él es fundamental estar en forma, “encima de un escenario cuando la sangre no te llega bien al cerebro es difícil tomar buenas decisiones a la hora de hablar, de afinar…necesitas tener un poquito de fondo”.

“Cuando estamos de gira comemos mal, en sitios de carretera, pero es una especie de convivencia que engancha y es necesario cada uno o dos años”, explica. Y ha llegado el momento de dejar su día a día, que, según él, es bastante monótono, “llevo a los niños al colegio, como, entreno algo, veo una película y me acuesto. Toco un poco la guitarra, el piano, pero es super normal”.

“Hay una canción que he hecho, que no está en el disco, que es una de las que más disfruto, Un alumno más, la que da título al disco”

En esta gira volverá a cantar esas canciones que la gente le sigue pidiendo, “me veo obligado a cantarlas porque la gente las pide y las reconoce y creo que sería injusto no hacerlo pero si fuera a nivel personal, yo no las cantaría”, afirma. Pero lo hará y las intercalará con sus nuevos temas. “Hay una canción que he hecho, que no está en el disco, que es una de las que más disfruto, Un alumno más, la que da título al disco”, nos confesaba, “también Colgado de la vecina, Septiembre… Cuentan historias que a mí me han pasado, a mucha gente le ha pasado, todo el mundo ha estado colgado de la vecina y son canciones que me gustan y me hacen gracia”.

Lleva diez años sobre los escenario y las cosas han cambiado mucho en ese tiempo, “las primeras giras eran una auténtica batalla, sólo podía quedar uno, como Los Inmortales”, aunque reconoce que ahora es diferente, “somos, todos, padres de familia y prácticamente ni bebemos ni nada, somos unos payasos, nos hemos quedado para nada, ni rock & roll ni nada”.