Sandra Bullock se enamora de un pibonazo
Es fotógrafo y está cañón, pero tiene un pasado turbio
Sandra Bullock ha despertado la envidia de medio mundo y no por lo bien que luce a sus 51 años, o por lo bien que sigue su carrera, o por el dineral que debe tener en la cuenta corriente…no, en esta ocasión, el objeto de deseo es su nuevo novio: Bryan Randall.
Hasta hace unos días casi nadie había oído hablar de él, ahora es toda una celebridad y sus espectaculares ojos azules miran desde infinidad de medios de comunicación. Y no debe molestarle porque lo de ponerse delante de la cámara no es nuevo para él. Originario de Portland, comenzó su carrera como modelo y ha trabajado para firmas como Hugo Boss o Saint Laurent.
También le hemos visto protagonizar reportajes con top model como Cindy Crawford con la que apareció en Vogue Singapoure en 2011. Aunque sigue haciendo alguna cosilla en este campo, su lugar está ahora, fundamentalmente, detrás de la cámara.
Los niños son uno de sus temas favoritos como fotógrafo y es que le gustan los peques, de hecho, es todo un padrazo. Tiene una hija, en edad de ir a la universidad, que está encantada con él y seguro que se lleva a las mil maravillas con el hijo de Bullock.
Poco se sabe del comienzo de su relación, hace ya algunos meses, que no se confirmó públicamente hasta que aparecieron juntos en la boda secreta de Jennifer Aniston y Justin Theroux con los que ahora protagonizan cenas de dobles parejas pese a los rumores de separación que circulan desde hace unos días.
La actriz vuelve a sonreir al lado de este guaperas, dos años más joven que ella, que ha logrado que supere el escándalo que supuso su divorcio de Jesse James tras haberle sido infiel con una tatuadora en 2010 mientras rodaba Un sueño posible por el que ganó un Oscar.
Poco más se sabe de él pero seguro que a partir de ahora y debido a su romance hollywoodense, empezaremos a tenerle hasta en la sopa. Y que conste que no nos importa, nos alegra la vista.
