Taylor Swift: “Es una Barbie elitista nazi”

Está claro, Taylor Swift no deja indiferente a nadie, y con nadie hay que incluir tanto a las chicas que han encontrado en ella un modelo a seguir y la alaban por cada paso que da, como a los que no creen que sea el mejor ejemplo para las mujeres.

Su música, su estilo de vida y su influencia sobre las masas no sólo ha calado en la gente joven. Una intelectual, profesora universitaria de Humanidades y reconocida icono feminista como es Camille Paglia ha convertido a la cantante en la protagonista de su último ensayo publicado en The Hollywood Reporter y no precisamente para destacar sus cualidades sino para criticarla como cabeza de la cultura de las ‘girls squad’.

Ha tachado la experiencia de escribir sobre Swift como algo horrible porque le recuerda a “las rubias fascistas que gobernaron la escena social” de su juventud. Critica su estilo de vida seguido por escuadrones de chicas que hacen de su vida “exageradas exhibiciones”.

Según la escritora, para progresar en el feminismo hay que acabar con aquellas “risitas, lenguas fuera y la pose de abrazo de oso de Swift” y, por eso, recomienda a la cantante que deje de hacerlo, por el bien de las mujeres.

Tampoco entiende la cultura de selfies que domina en estos momentos y ha pedido a las jóvenes que se unan para lanzar proyectos emocionales e innovadores, no para hacerse selfies en posturas exageradas. “¿Pueden los selfies de grupo ayudar a impulsar las metas de las mujeres?”, se pregunta.

De momento, Paglia se ha encontrado con las críticas de B’nai B’rith, un grupo judío australiano cuya comisión antidifamación que ha pedido una disculpa pues la comparación es “obscena e insensible”.

Pero Taylor Swift no es la única artista víctima de sus dardos. Drew Barrymore, Reese Witherspoon, Selena Gómez, Willow Smith, Kendall Jenner, Sofía Richie, Gigi Hadid o Cara Delevingne. Además, dice que Adele “se unió al club en noviembre cuando cenó en Nueva York con Emma Stone y Jennifer Lawrence”.