Lo peor de la televisión en 2015
Hacemos un repaso a aquellos programas o momentos televisivos que no se tendrían que repetir en este 2016
Con el final de año llega el momento de hacer balance de lo que ha significado este 2015 en los distintos campos de la información. En el área de la televisión resulta realmente complicado elaborar listados de lo mejor o lo peor, ya sean series, programas, momentos… Es tanto el material que nos deja cada día la pequeña pantalla que jamás elaboraremos un listado al gusto de todos.
Creemos que es más sencillo coincidir en aquellos espacios o momentos televisivos que no deberían repetirse en 2016 por las razones que sean: ya sea porque dan vergüencica ajena, porque no estuvieron a la altura de las expectativas, porque con una vez que ocurra basta, porque no tuvieron gracia ninguna…
Así que hemos elaborado una lista de lo peor que nos deja la televisión en este 2015. Seguro que habrá cosas igual de lamentables que las que incluimos en nuestro listado o incluso más, pero… ¿a que no salvarías nada de lo que mencionamos?
Uvas interruptus de Canal Sur
¡Pobre andaluces! Todo el año esperando para festejar la Nochevieja con las tradicionales campanadas y las uvas y en Canal Sur, la televisión regional de Andalucía, van y se piran a publicidad en medio de las campanadas. Algo que no se puede volver a repetir… aunque hay que reconocer que nos echamos unas risas en redes sociales.
Alatriste, Rabia y Aquí Paz
Desde luego, el 2015 no ha sido un año especialmente feliz para Mediaset en lo que a estrenos de series se refiere. Pocas son las que ha estrenado en este año y han sido renovadas. Ello se debe a que algunos de esos proyectos son realmente lamentables, en especial Alatriste, Rabia, y Aquí Paz y Después Gloria. Tres series de muy baja calidad. Menos mal que, de cara a 2016, en Mediaset han hecho los deberes y están preparando auténticos seriones como La Verdad, Sé Quien Eres o la última temporada de El Príncipe y la novena de La Que Se Avecina.
Combate Mayweather- Pacquiao
Lo llamaron el "combate del siglo", una de las citas más esperadas de la historia reciente de la televisión. Una velada de boxeo que se vería en no sé cuántos cientos de países, que movía no sé cuántos millones de euros y que luego resultó un auténtico fiasco y muy aburrida. Además, en España hubo bastantes problemas para seguir con garantías el combate ya que los servidores de la plataforma que tenía los derechos para su emisión se saturaron.
Programas musicales y concursos de La 1
En TVE deben de tomar las puertas de El Ministerio del Tiempo y viajar al siglo XXI en algunos aspectos; sobre todo en el área de entretenimiento. Es como si en la cadena pública estuvieran anclados en los años 90 y la mayoría de programas que estrenan fueran nuevas versiones de los que se emitían en aquella época. De ahí que hayan fracasado la mayoría de sus talent shows musicales o de sus concursos. TVE se ha estampado con programas como Alfombra Roja Palace, Insuperables, Jugamos en Casa… y estos hay que unirlos a otros que fracasaron en 2014 por idéntico motivo. En 2016, no se puede seguir haciendo televisión como en 1996.
Realities a medio gas o cutres
Reality show no es sinónimo de telebasura, por más que algunos pretendan que así sea. La telerrealidad es un género televisivo tan respetable como otro cualquiera, con millones de adeptos y que genera unos beneficios espectaculares a las cadenas. Eso, claro está, cuando hablamos de formatos que están bien, no de chapuzas, cutreces o medias tintas. En este 2015 hemos visto como Antena 3 exploraba, de nuevo, el terreno del reality show con Casados a Primera Vista, un formato con una idea de partida muy interesante pero que exige más atrevimiento por parte de la cadena y enfangarse más, echarle más leña y, sobre todo, apoyarlo con más espacios en parrilla dedicados al reality. Tendrá una segunda temporada que se estrenará en 2016… veremos cómo resulta.
El otro ejemplo de lo que no debe haber el próximo año en este sentido es Pasaporte a la Isla. Lo que se vendía como un reality low-cost de supervivencia para el verano fue en realidad el reality más casposo de la historia. Tuvo malísimas audiencias y, creemos, que en Telecinco han aprendido la lección.
Chicote, cazado
No es la primera vez que ocurre ni será la última, en este tipo de formatos las cosas son así, pero no por ello tenemos que dejar pasar por alto que nos mientan a la cara. Antena 3 estrenó este año dos documentales gastronómicos con Alberto Chicote como reportero. El Precio de los Alimentos se llamó y en él veíamos que Chicote repasaba las diferencias de precios en distintas zonas del planeta en alimentos básicos como el arroz. Veíamos cómo Chicote embarcaba en el aeropuerto rumbo a países asiáticos, africanos… Pero en realidad, como después se supo, Alberto Chicote no estuvo en todos estos países, sino que las imágenes se encargaron a periodistas freelance y luego fue Alberto Chicote quien puso su voz sobre el montaje final. Hay que decir que el chef obedecía órdenes y que por tanto no es culpa suya… Pero muy mal por parte de Antena 3 este engaño a su audiencia.
The Brink
Habrá series peores en todo el planeta y, sin ir más lejos, en EEUU. Pero que llevan la firma de HBO es para no creérselo. Estamos hablando de la comedia política The Brink, protagonizada por dos auténticas estrellas de Hollywood, Tim Robbins y Jack Black. Era absurda sin ningún tipo de gracia y además banalizaba asuntos como el terrorismo con los que no conviene hacer broma.
La serie que obtuvo unos mediocres resultados de audiencia en su primera temporada fue renovada por una segunda entrega. Pero alguien en HBO debió sentarse a pensar durante un minuto porque, finalmente, la cadena echó para atrás la renovación y la ha cancelado definitivamente.
Las galas
Son lo peor y las hay de todos los colores. De las galas televisivas se puede decir algo similar a lo que ya apuntábamos con los programas de entretenimiento de La 1: son un producto televisivo de hace dos décadas (quizá por eso haya tantas en TVE). Por lo general, no cosechan buenas audiencias, son grabadas y, prácticamente, todas las cadenas las hacen igual. Por favor, que alguien se invente un nuevo formato para entretener a los espectadores en Navidad y que se dejen de reproducir el patrón Noche de Fiesta.