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Así es Resident Evil Origins Collection
Una colección bastante definitiva
Hace algún tiempo os hablamos de Resident Evil HD Remaster, "joya de la corona" de Gamecube y una de las descargas más interesantes ofrecidas por el catálogo de PS4 y Xbox One. Hoy, clavando ese "año después", llega Resident Evil Zero a vuestra tienda digital, y con él aterriza en formato físico la colección definitiva de las que antaño fueran "exclusivas de Nintendo": Resident Evil Origins Collection.
Si sabes de que hablamos es muy probable que tengas ya este disco metido en tu consola, pero por si andas algo perdido, deja que te aclaremos las razones por las que esta colección debería estar luciendo palmito en tu estantería antes de que acabe la semana.
Grandes juegos, en plural
Resident Evil Zero es el primero en la línea temporal de la saga. La historia co-operativa de Rebecca Chambers (miembro recién llegado a S.T.A.R.S.) y Billy Coen, ex-Marine condenado a prisión por asesinato, acabó conformando un juego redondo. Llegó a Gamecube pocos meses después del lanzamiento del remake de la primera entrega.
Su arranque, en un tren clásico de largo recorrido infestado por criaturas; rompía con todo molde creado hasta el momento en la franquicia y un sistema de juego novedoso en el que el jugador puede alternar el control entre personajes para encarar enemigos o resolver puzles aportada ese soplo de aire fresco que necesitaba la franquicia.
De Resident Evil (remake) muy poco podemos decir que no hayamos dicho ya. El necesario remake del juego con el que empezó todo. La mansión, los primeros zombies, el primer Tyrant... todos esos grandes momentos recreados bajo una dirección artística impecable (la misma que en Zero) para crear un juego que, a día de hoy (14 años después), parece no tener fecha de caducidad.
Con el trabajo de "remodelación" que se ha currado Capcom, comprendería que me pidieran 30 euritos por cada uno de estos juegos por separado (y mis amigos y familia saben que los pagaría; de hecho, he comprado las versiones japonesas individuales de PS3), pero que la oferta sea un pack con ambos juegos a precio reducido bajo mi punto de vista no tiene ningún 'pero'.
Con lo que ha llovido y parecen juegos de 2016
El tema es que cuando la dirección artística de un juego es muy buena, ese juego pasa a tener un factor (de algún modo) atemporal que es muy difícil de romper. Ocurre con muchos juegos retro de los que no cambiaríamos nada y empieza a ocurrir con juegos no tan retro, como este par que tenemos hoy sobre la mesa.
Ambos Resident Evil utilizan escenarios pre-renderizados; esto es, imágenes fijas creadas y pintadas digitalmente sobre las que se mueven los personajes en tres dimensiones. Dicho así puede sonar raro para el que no lo viviera en su momento, pero así nació Resident Evil y poca queja escuchareis al respecto.
Los escenarios son impresionantes, sin más, es lo que tiene ir fotograma a fotograma, imagen a imagen, tienes un número concreto de escenarios para pintar y al final son todos una maravilla. Y luego llega 2016 y nos los ponen en alta definición, y encima crean un sutil movimiento de cámara dentro de la imagen y les permite mostrar el juego en formato 16:9. A eso añaden efectos de iluminación creados en tiempo real, nuevas texturas y "un completo" para los personajes, que parecen literalmente de otra generación. Echad un vistazo a este video de los compañeros de Digital Foundry; aunque vayáis caninos de inglés, os daréis cuenta de cuanto se ha enriquecido el juego. A la izquierda Gamecube, a la derecha PS4.
El resultado son dos juegos que parecen creados en 2016 para 2016, de verdad. Es brutal ver como, cuando la materia prima es buena, el paso del tiempo siempre tiene fácil arreglo. Es verdad que yo soy un incondicional de la saga, pero creo que puedo dejar a un lado los sentimientos y transmitir con credibilidad que esta colección es una compra obligada. Son dos juegos de terror excelentes y el precio que piden por ambos no deja lugar para dudas. A por él.