Scarlett Johansson sabe por qué no funcionan los matrimonios entre famosos

No es normal encontrar en Hollywood una pareja que se haya consolidado con el paso del tiempo y haya permanecido unida. Parece que la inestabilidad sentimental va unida al hecho de ser un actor o actriz de fama. Vale, hay salvadas excepciones pero rara es la pareja en la que siendo los dos famosos se alargue por décadas.

Son muchas las causas que hacen difíciles estas relaciones. Las estrellas de Hollywood suelen tener agendas muy apretadas que les obligan a estar viajando por el mundo mucho tiempo y les mantiene alejados de casa más de lo que una pareja puede aguantar. Además, se mueven en un mundo lleno de tentaciones en las que es difícil no caer

Scarlett Johansson lo tiene claro, ella tiene la razón por la que una pareja de famosos no puede funcionar y lo ha explicado en una entrevista con Cosmopolitan. “La logística de estar con otro actor es desafiante. Tiene que haber un entendimiento real de cómo compartes tu tiempo, especialmente cuando la carrera de las personas van al mismo ritmo”, argumentaba, “o incluso si una persona es más exitosa que otra, eso también es un desafío”. Puede que haya algo competitivo”.

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Lucha de egos en la pareja, parece que ese pudo ser la causa de su primer fracaso matrimonial. En 2008 se casó con Ryan Reynolds. En aquel entonces Scarlett era la chica de Lost in translation, acababa de salir Vicky, Cristina, Barcelona de Woody Allen y La hermosa Bolena junto a Natalie Portman y, además, habían contactado con ella para Iron Man 2. Difícil de superar, desde luego, su marido por aquel entonces, no podía presumir de tanto éxito aunque no le faltaban proyectos.

No es la primera vez que Scarlett justifica los fracasos con la incapacidad de asumir que el éxito de tu pareja sea mayor. En la revista Parade declaró que “la actuación es un mundo extraño para coexistir. Es muy volátil. Siempre estará la persona más exitosa. Está relacionado con el rechazo, porque los actores, si no están teniendo éxito, lo conectan directamente con impopularidad al punto de pensar que nadie los quiere. No es necesariamente cierto. Yo soy constantemente rechazada. El matrimonio requiere mucho trabajo. Requiere un hombre que no solamente confía en el amor que hay por el otro, sino que también tiene confianza en lo que está pasando con su carrera. Tiene que estar en un campo completamente diferente al tuyo. Mi marido está relacionado con el arte”.

Scarlett está casada con el empresario artístico Romain Dauriac Johansson con el que ha tenido a su primera hija y parece que la relación le funciona, claro que él no es famoso.

Por su parte, Ryan Reynolds también se ha vuelto a casar, pero él ha repetido esquema y se ha casado con una actriz de éxito como es Blake Lively. Por cierto que están esperando a su segundo hijo, parece que, pese a las teorías de su ex, lo suyo sí va viento en popa.