¿Son estos los robots más estúpidos del mundo?

Seguro que en más de una ocasión alguien os ha recordado aquello de que "inténtalo y no te rindas". Su pasión por los robots y la repetición de este mantra ha convertido a Simone Giertz en toda una celebridad en las cuatro esquinas del planeta. Esta sueca que vive en Estados Unidos desarrolló su amor por la robótica en China y ahora desarrolla sus creaciones en San Francisco. Sus demos en Youtube cuentan sus visitas por millones.

Porque los robots de Simone Giertz realmente no son necesarios del todo y, para más inri, ni siquiera cumplen bien con su función (aunque no son inventos absurdos). Entonces, ¿por qué triunfan? Porque sus creaciones son magníficas y capaces de poner patas arriba una casa en apenas unos segundos. Una máquina pintalabios que te deja hech@ un cuadro, un despertador que te machaca el pelo, unos brazos para tu iPhone o una máquina que te hace el desayuno de aquella manera... ¡No tienen desperdicio!

Su popularidad le ha valido millones de visitas en su canal oficial y toda clase de artículos y reportajes en webs de todo el mundo. Incluso hace unos meses visitó el programa de Pablo Motos para demostrarle al mundo el poder de sus robots... aunque no se enterase muy bien con las traducciones.