Éxito rotundo de LOS40 en el inicio de La Mercè de Barcelona

Eran las siete de la tarde cuando se encendió el primer foco de un enorme escenario plantado en el regazo de las mágicas fuentes de Montjuïc. Ese era el pistoletazo de salida de las fiestas barcelonesas de La Mercè. Tras el escenario, muchos nervios por el show que acababa de empezar.

El sonido ya retumbaba desde la plaza España hasta la montaña que miraba con atención a las decenas de miles de personas que se acercaron para vivir un auténtico festival irrepetible. Contamos con un maestro de ceremonias único como es Tony Aguilar y los compañeros Adrià Ortega, Adrià Soler, Neus González y Víctor de la Torre.

El primero en poner su primer acorde fue el cantante barcelonés Jordi Ninus, que ofreció un directo inmaculado. Ninus presentó su mejor repertorio con canciones de su último disco París y su popular himno veraniego Junts.

La noche iba cayendo sobre nuestras cabezas cuando salió a escena, el hombre que ha conseguido conquistar el continente europeo a ritmo de canciones en español, Álvaro Soler. El de Sant Cugat del Vallès se arrancó con ese sonido positivo de su Eterno Agosto y por supuesto no olvidó recordarnos que aunque el verano nos había dejado nosotros vivimos bajo El Mismo Sol, así como su historia de desamor con Sofía. Además, el actual juez de The X Factor Italia se trajo a ocho “sofias” de diferentes puntos de Europa para que le vieran tocar en casa y disfrutaran de una merienda con él.

La avenida rugía cada vez más cuando salí al escenario junto a Tony Aguilar para dar la bienvenida a Barcelona a los colombianos que han puesto banda sonora ha nuestro verano con Como Te Atreves. Morat se marcaron un directazo de toma pan y moja, gracias a las canciones de su nuevo disco. La gente enloquecía por momentos, pero la cosa no quedó ahí.

Minutos más tarde, llegó el nuevo David Otero con energía en estado puro. Su show estuvo repleto de sorpresas como su versión del éxito Volverá de ECDL a dúo con los chicos de Morat y su último éxito Una Vez Más. La evolución del pez a el gran Otero nos regaló un directo de esos que no paras de saltar con los brazo levantados mientras te desgañitas cantando todas las canciones.

Cerca de medianoche era el momento del cabeza de cartel que puso la guinda a La Mercè con LOS40. Juan Magan se presentó con un line-up espectacular, performance llenas de color, elegancia, colores, luces, pantallas de leds. El de Sabadell se marcó una sesión con mayúsculas mientras interpretaba sus mayores éxitos en los últimos años. En ese momento demostró porqué es el rey del electrolatino. Hasta las torres venecianas que custodian la Avenida Reina Maria Cristina de Barcelona se meneaban a ritmo de Baila Conmigo, Vuelve y Quiero Que Sepas, entre otros muchos.

Tras una hora de energía sin pausa con Juan Magan, ante más de 35.000 personas, el equipo de LOS40 y el propio artistas despedíamos una jornada llena de ilusión, talento, amor por la música y llena de celebración, desde lo alto de la cabina. Un año más, el éxito había conseguido llenar de sonrisas y mucha música el corazón de decenas de miles de barceloneses por La Mercè.