Especial
Xuso Jones: “No creo en el estándar de mujer delgada de pasarela”
Hablamos de libros, música y Eurovisión
A veces parece que cuando hablas con Xuso Jones lo estás haciendo con alguien bastante mayor y es que tiene tan claros los objetivos en su vida que transmite una madurez que muchos querrían.
Acaba de publicar La distancia es un café, la novela que cierra su trilogía con la que ha logrado cautivar a los lectores más jóvenes y románticos.
Pero ahí no queda la cosa porque además de escritor, sigue siendo músico con proyectos inmediatos, empresario (como sus personajes) y rostro televisivo (en breve).
De todo eso y, sí, también de Eurovisión, hemos hablado con el que fue uno de los preseleccionados el año pasado.
¿Recuerdas cómo fue el momento de ponerle el punto final a tu trilogía?
Me dio penilla. Fue como ‘ostras, ya se ha terminado todo’. Pero ha sido una experiencia super chula. A lo mejor viene algún otro más adelante pero ahora me enfoco con la música.
¿Era el final que habías pensado en un principio o la historia te lo ha cambiado?
Ha variado. Me gusta lo tétrico y quería algo tétrico para el final pero me dijeron ‘por favor, hay que acabarlo con final feliz’. Y así ha sido.
¿Cuál era el tuyo alternativo?
Una muerte.
Después de contar su historia, supongo que uno les coge cariño a los personajes. ¿Cuál es tu favorito?
Marisa. Ella es muy heavy, suelta lo que quiere, lo dice de forma muy espontánea, muy graciosa. Creo que todo el mundo debería tener una Marisa en su vida. En Murcia hay mucha gente así.
Por cierto que con ella dejas claro que no hay edad para enamorarse.
Para eso soy muy friki. Yo tengo muchos amigos mayores. Tengo una amiga que se llama Mari Carmen que es la madre de mi amiga y ahora ella es a veces más amiga que mi amiga. A veces quedo con ella para comer y me dice ‘¿cómo es que has quedado con mi madre para comer y no me has avisado?’. Es una mujer que se divorció y está abierta al amor, le gustan sus cosas, nos echamos unas risas.
La gente está abierta al amor siempre.
La gente está abierta al amor siempre, con 80, con 90, con 50…no creo que sea cosa de la edad. Sí que te has llevado más palos y por lo general lo vives de otra manera porque sabes que no todo es tan bonito.
Muchas de estas trilogías acaban en la pantalla. Si la tuya fuera al cine, ¿qué actores te gustaría que dieran vida a Olivia y Paulo?
Ostras…no sé, que se parezcan físicamente a como yo me los imagino, eso es muy difícil. Olivia me encantaría que fuera Blanca Suárez, creo que podría hacerlo muy bien.
Le faltan algunos kilitos.
Bueno, que coja un par de kilitos y luego se los quita. Y de chico... no tengo a ningún actor... no sé.
Tu protagonista, Olivia, no cumple con los cánones sociales de peso. ¿Una reivindicación del ‘body positive’?
Yo me la imaginaba así. Acabo de empezar un documental, en mi vida real, de pérdida de peso y vida sana. Durante tres meses haciendo vida sana, deporte, ejercicio, una dieta saludable. Estará en youtube, cada semana un episodio.
Vamos, que al final sí eres partidario de los cánones establecidos.
Soy partidario de una vida sana pero también soy partidario de que si tienes unos kilitos de más y tu vida es sana, te permite moverte bien y te ves bien con tu ropa…yo no creo en el estándar de la mujer delgada como en las pasarelas. Yo creo que cada uno tiene que ser feliz con lo que se vea bien.
Pero, vamos a ser honestos, ¿tú te fijarías en una chica de talla 44?
Sí, por supuesto.
En el libro destacas el poder de las ‘influencer’, ¿cuál es tu top 3?
Me gusta mucho Dulceida porque la vea muy real, no la sigo en tema moda pero la veo en los vídeos y digo ‘mira qué chica más real, más simpática’. Me gusta mucho.
Después, me hace mucha gracia aunque no comparto su filosofía para nada Soy una pringada que es como todo el rato cosas malas de la vida pero me hace gracia. Seguro que es actuado pero me hace mucha gracia.
Me gustan mucho The Tripletz, son dos chicos que hacen lo que les da la gana, son la risa cuando se juntan. Me gustan mucho sus vídeos.
Otro de los temas que trata el libro es la gestión de las emociones, ¿tú como lo llevas?
Canalizo bien las emociones. Es muy difícil que me cabree, muy difícil que me venga abajo… y si sale algo mal pienso, ‘no pasa nada, seguro que viene algo mejor’. Nunca he tenido un bajón o una depresión.
Paulo vive una noche muy peculiar en París. ¿Tú te has visto en alguna ocasión contándole tu vida a un extraño?
Sí, en Londres, hace poco. En el hotel había muchos trabajadores españoles y acabé yéndome a tomar unas copas con dos de los camareros que eran españoles. Después acabé con uno y acabamos contándonos la vida y fue super interesante. Me contó sus problemas, yo mi vida, cómo iba todo. Fue muy chulo.
Has hecho un concurso para tomar café. ¿Cómo se lidia con un encuentro con fans, qué les interesa saber?
Son gente que te sigue, que les encanta tu libro, tu música... Es super curioso porque no querían saber nada del libro. Una vez hice spoiler una vez porque yo me vengo arriba y lo cuento todo y les dije que si querían hacerme preguntas del libro y me dijeron que no, que preferían esperar a leerlo.
¿Qué es lo más bonito que te han dicho de tu trilogía?
Me han resaltado por redes sociales lo del peso de Olivia, que les encanta que no sea el estándar de peso. Y las chicas que han dicho que les ha dado positividad y la idea de que puedes conseguir cosas.
Choca un poco que apuestes por una protagonista con kilos y luego grabes un documental quitándotelos tú.
No estoy en forma. Gano mucho vestido pero peso 94 kilos…
Yo no me veo bien. Al final la gente al final es muy frívola. La gente es como ‘uy, qué delgada está esa chica’ y luego, la misma persona, ‘ay, tengo que perder unos kilos’. ¿Criticas a una chica por estar delgada y luego quieres estar igual? Yo quiero estar saludable.
Pues en Instagram no te vemos nada mal.
En Instagram es postureo y en todas las fotos todo el mundo se sabe colocar. Te pones la ropa que te favorece, con la mejor pose…
Entonces, ¿cuál es el objetivo?
El objetivo es verme bien.
¿No lo haces ahora?
No, el pantalón me queda apretado. Por una vez me quiero ver bien. Me escribe mucha gente que sufre bullying, con ansiedad de comida preguntándome cómo hice yo para adelgazar porque yo pesaba 110 kilos.
Yo siempre he tenido la tendencia de engordar y adelgazar y ahora tengo mentalidad de vida sana para siempre.
¿Lo que más cuesta?
Yo era muy de refrescos light y me los han quitado. El fin es mostrar mi experiencia, no quiere ser gurú pero sí motivar a la gente joven que coma mal, que tenga sobrepeso piense que si yo puedo, él puede.
Para el que todavía no lo sepa, Not Santas, la empresa de productos con café que lanza la pareja, existe de verdad. ¿Los resultados reales son tan buenos como los ficticios?
Eso es imposible. Poco a poco pero va bien.
Escritor, empresario… ¿qué pasa con el cantante? Tienes nuevo single a la vista.
No tenemos fecha señalada pero vamos a estar con la música ahora muy fuerte. Va a ser en castellano, va a ser muy bailable, para el verano.
¿Qué nos puedes avanzar?
No quiero dar muchos datos. No es reggaetón pero es bailable.
O sea que va a ser urbano.
Sí, me ha gustado esa palabra.
Hablando del anterior, el tema con el que querías ir a Eurovisión. Visto lo visto, ¿qué opinas del tema?
Fue un poco bochornoso. Yo vi la gala pero de lo que ha pasado después no me he enterado mucho.
¿Tú cómo lo viviste como preseleccionado?
Yo quiero creer que yo estuve ahí y no se jugó. La canción de Barei tenía mucho apoyo y ganó porque se lo merecía y me costaría creer que había un tongo amañado desde el principio.
Este año criticaban el jurado y decían que era parcial. Creo que para el año que viene deberían poner un jurado anónimo o que no conozca a nadie y, sobre todo, lo que yo cambiaría es que el voto del público sea primordial. Si me he gastado el dinero no me puedes quitar el derecho a decidir o si no me devuelves el dinero o voto por internet.
¿Qué te parece Manel Navarro?
No le he seguido mucho. La canción me gusta, me parece fresquita pero como Eurovisión siempre tiene tantas críticas por todos los lados… Eurovisión es un mundo aparte. Yo lo vivé muy de cerca y es un mundo aparte.
Y puestos a opinar. ¿Un poco de envidia porque Blas Cantó se convirtiera en el primer ganador masculino de Tu cara me suena?
Yo soy cero envidioso. Él imita de puta madre. Además de cantante podrá ser imitador. Si no llega a ganar él hubiera pensado que no era justo. No ha habido nadie en Tu cara me suena que imitara mejor que él.
¿Volverás a la tele?
Sí, hay un proyecto que se empieza a grabar dentro de nada. Es de música, de humor… dentro de poco.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...