Los zombies se frotan las manos: en España no hay plan para un apocalipsis a lo 'Walking Dead'
Así lo admitió el gobierno del PP ante una pregunta de un senador
España sería carne de cañón en el caso de que un ejército de muertos vivientes hicieran acto de presencia, tal y como ocurre en la serie televisiva The Walking Dead.
Es decir, nuestras posibilidades de salir airosos del trance serían muy reducidas y es poco probable que los métodos de defensa que se utilizáramos resultaran eficaces.
¿Que como lo sabemos? Ha sido la propia Administración del Gobierno la que ha admitido públicamente que carece de un plan de contingencias para una situación de emergencia extrema como es un apocalipsis zombie.
La noticia ha llegado después de que el senador de Compromís Carles Mulet formulara en febrero una pregunta al respecto (y no porque sea adicto a las ficciones de género y muertos vivientes, sino para protestar por la supuesta "respuesta vacía" con la que el Gobierno ha despachado en ocasiones las cuetiones de los parlamentarios).
"¿Qué protocolos tiene adoptados el Gobierno ante la posibilidad de un apocalipsis zombi?", cuestiona Mulet, por escrito.
La contestación de la Administración, también por escrito, no tiene precio y, sí, mucho humor.
"El Gobierno informa a Su Señoría que no dispone de protocolos específicos para dicha eventualidad", indican.
Además, dan explicaciones: "Entre otros motivos, porque poco se puede hacer llegado ese momento (si se trata del fin del mundo)".
La misiva también indica que si en lugar del fin del mundo, por 'apocalipsis' se entiende 'situación catastrófica", otra de las acepciones del término, "España dispone de un sistema global de procedimientos concretos y de protocolos de prevención de las emergencias".
Eso sí, estos no están adaptados o no son específicos para una situación ocasionada por zombis, reconoce la institución.
Y añade un chascarrillo: "En relación a la segunda acepción del término zombi, "atontado, que se comporta como un autómata", se informa a Su Señoría que España y sus administraciones públicas disponen de diversas líneas de actuación, aunque el Gobierno duda de que quienes se pudieran encontrar en las circunstancias descritas en la citada definición pueden llegar a protagonizar una situación de apocalipsis como por la que se interesa su Señoría".