Este es el padre del reggaetón y dice que su éxito “fue un trofeo de Satanás”

Nicky Jam, J Balvin, Maluma, Daddy Yankee…el reggaetón vive un buen momento pero no es algo nuevo, flipa si pensabas que era un invento de este siglo.

No, en los 90 ya había un cantante panameño llamado Edgardo Franco al que todos llamaban El general porque actuaba vestido de militar.

Pasó 17 años dedicado a la música con 19 álbumes publicados y una larga lista de premios y discos de oro y diamante (de cuando se vendían discos físicos).

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“Alza la mano si tú estás gozando. Muévelo, muévelo, qué sabrosa”. No es la letra de ninguna canción de los colombianos de moda sino la de Muévelo, uno de los mayores éxitos de este cantante.

Hacía dancehall reggae y su valor añadido fue introducir en este género el español. Es por eso que muchos le consideran el precursor del actual reggaetón.

Todavía recuerda cómo fue la grabación de aquella canción que le llevó a la cima aunque él no guarde un buen recuerdo de aquello.

“La letra de la canción era una cosa que causaba conflicto con mi conciencia”, reconoció en un canal religioso, “me ofrecieron una bebida alcohólica para calmarme y me sentí un poquito más a gusto. Empecé a cantar, les gustaba lo que escuchaban y sonó en todas las radios. Fue un trofeo de Satanás”.

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Son las palabras del nuevo Edgardo, el que en 2004 decidió dejar la música y convertirse en predicador de una congregación cristiana de Testigos de Jehová.

Reconoce que cuando disfrutaba de las mieles del éxito no era todo tan bonito como pudiera parecer. “Me hice adicto a los aplausos”, confesó, “cuando uno está en la cima del mundo de Satanás no hay nada lindo ahí. Cuando llegaba al hotel no había aplausos, había un silencio que atormentaba mi conciencia”.

Acabó buscando una vía de escape a través del juego, el alcohol y la prostitución pero no le dieron el alivio que buscaba. Eso lo encontró en la religión.

“El camino para volver a la verdad fue realmente algo difícil. Cada vez que me iba a retirar siempre había un contrato más grande”, recordó. Pero lo dejó aunque el más de medio millón de reproducciones de esta entrevista dejan claro que sigue interesando.

Ahora vive retirado de la música y no sabemos si escuchando las nuevas canciones que tienen algo de esas melodías que él cantaba.

¿Te imaginas a J Balvin o Maluma como pastores de una iglesia? De momento parece bastante improbable.