Esta es la guía definitiva para convertirte en una ‘fit girl’
Esta nueva tribu online suma adeptos
Cada vez es más difícil encontrar a alguien cercano que no sea runner o conozca a alguien que lo sea. Es la tendencia del momento que ha dado lugar a una nueva tribu online: las ‘fit girl’.
Si antes la música marcaba la creación de tribus urbanas y teníamos a los heavys, punks, grunges o rockers, ahora son las redes sociales las que crean nuevas tendencias grupales y las ‘runners’ tienen la suya propia.
Lidia A. Costa trabaja en una revista de moda y acaba de publicar su primer libro en el que analiza este fenómeno. Desde el punto de vista más serio lo investiga para su tesis doctoral pero, desde el punto más divertido, lo resume en su guía ilustrada.
Ella asegura que las ‘fit girl’ tienen unos perfiles similares con un comportamiento ritualizado. “Al igual que las tribus urbanas tradicionales, ellas tienen en común un lenguaje, una forma de vestir, una forma de comunicarse y, en este caso, con el nexo común de la práctica deportiva y el gusto por la moda”, explica.
Lidia no se considera, en absoluto, una ‘fit girl’ pero sí se ha fijado en ellas y han llamado su atención.
“Lo que más sorprende es cómo basan todos sus esfuerzos en tiempo y en sacrificios psicológicos y físicos en dos conceptos: el de salud y el de empoderamiento”, analiza, “y encuentro una gran contradicción en eso y es lo que estoy investigando”.
Su guía es un resumen sistematizado de cómo funcionan estas mujeres en sus redes sociales y nos hemos quedado con 10 puntos que debes tener en cuenta si piensas convertirte en una de ellas.
#1. INSTAGRAM ES POSTUREO Y FICCIÓN. Que Instagram es puro postureo es algo que a estas alturas tenemos todos asumido pero es que, también hay algo de ficción y Lidia asegura que pueden llegar a mentir o comprar seguidores.
“Todas (con las que he hablado) reconocen que hay bastante de ficción y producción detrás de todo eso. Si un día tienen que colgar una foto y no han salido a correr o no han salido a sudar, se hacen una foto de las zapatillas o un detalle, se montan el texto y ya está, hay mucho de ficción”.
La cuestión es cumplir unos calendarios de publicación y dar continuidad a una vida que se corresponde con lo que ellas suponen que tiene que ser la vida de una ‘fit girl’.
#2. CROSSFIT, NO. Si quieres convertirte en una de ellas, elimina de la lista de deportes el crossfit, esa modalidad que se ha convertido en tendencia y que hasta practica nuestro compañero Dani Moreno 'El Gallo'.
“Las fit girl, aunque no lo reconozcan, buscan un cuerpo determinado y la práctica seria y continuada del crossfit no te permite mantener ese cuerpo, desarrolla mucho más la musculatura”.
#3. NO AL CANSANCIO Y EL AGOTAMIENTO. Cuando pensamos en deporte muchos pensamos en algo agotador y cansado pero esas son dos palabras que no existen en el vocabulario de estas mujeres.
“Tienen un empeño en presentarse como mujeres llenas de energía, capaces de sacar optimismo de cualquier situación y capaces de correr a las 6 de la mañana para poder cumplir con el resto de responsabilidades”, asegura Lidia.
“Es uno de los puntos fuertes de su filosofía: la positividad y energía a raudales, el ‘a tope de power’, que dicen ellas”.
#4. A LA MODA. La autora también hace una clasificación según el equipamiento de cada una y es que la moda es fundamental en este grupo.
“Es un paso más en la it girl de la que hablamos en las revistas de moda. Suma todo lo que tenían ellas más la práctica del deporte”, y eso conlleva gastos.
“Cada elemento que sumamos nos conduce a un nuevo producto a consumir pero eso sucede en cualquier moda, tendencia o tribu urbana 2.5, es la función última de cualquier moda”.
Y en este caso no se limita a la ropa deportiva también entra el consumo “de semillas de no sé qué, de un tipo de restaurantes saludables, de zumos o hasta de tratamientos de belleza… hay pedicura especial para runners”.
#5. DIETAS, NO. También se engañan a sí mismos a través del lenguaje. Dietas no pero, sí planes nutricionales.
“La ‘fit girl’ no utiliza el término dieta porque remite a restricciones muy fuertes, a sufrimiento, a pasar hambre y se habla de planes nutricionales que es lo mismo pero adornado, e imagino que, a nivel psicológico, ayuda a seguir esa disciplina de una manera más suave”.
#6. SIN MAQUILLAJE. Pese a todo el postureo que hay en los Instagram de estas chicas, de vez en cuando, se conceden el privilegio de apostar por la ‘mujer real’, “otra de las dicotomías de este grupo”.
“Ahora se permiten el ‘lujo’ de colgar una foto en un sofá y poner ‘hoy me lo gano porque no soy una super woman y me lo merezco’. Tienen que justificar el descanso y parece que ahora también tienen que justificar el no maquillaje y el recordarse a sí mismas que no todo el día pueden ir maquilladas como una puerta y para compartir entre todas el sufrimiento que parece ser que les puede generar el no maquillarse crean esa etiqueta del ‘no make up’ para tener vía libre para compartir las fotos sin maquillaje o la cara cansada”.
#7. BODY POSITIVE. También choca que surja un grupo que apuesta por un cuerpo tonificado, por los sacrificios para lucir un cuerpo determinado en un momento en el que no paramos de escuchar que hay que querer a nuestro cuerpo tal y como es.
Las ‘fit girl’ frente al ‘body positive’, “que cada una decida o haga lo que quiera. Estamos en un momento en el que no sabemos para dónde tirar”.
#8. IMPORTANCIA DE LOS HASHTAG. #ConLosDeberesHechos, #SoyCuquiRunner, #NoSudamosBrillamos… son algunos de los hashtag que utiliza este grupo que recurre a un lenguaje y una estética un tanto infantilizada.
“Es una forma de recuperar o reiterar una serie de estereotipos asociados a la mujer que cualquier feminista quiere desterrar y que en este fenómeno se recuperan y se ponen en valor y se muestran como una elección personal”, explica Lidia, “es algo con lo que no estoy de acuerdo pero entiendo que es parte del juego”.
#9. PAREJA PACIENTE. Hay que tener a un sufridor al lado con una alta dosis de paciencia. Pareja o amigo, el caso es que dan soporte a las ‘fit girls’ que, aunque no suelen fotografiarles sí les agradecen lo que hacen por ellas.
“Es divertido ver cómo estas personas que viven con ‘fit girls’ ven sus vidas transformadas y no se sabe hasta qué punto de forma voluntaria”, sospecha Lidia.
“Compartir el espacio de la casa implica que cada vez tienes que ceder más espacio en tu armario, el baño se va llenando de productos de la ‘fit girl’, cuando salen a cenar hay que esperar a que haga la foto de rigor con el filtro tal y cual. Resulta gracioso pero habría que preguntarle a estas parejas qué piensan porque tiene que resultar agotador”.
#10. GURÚS. Como en todo grupo ritualizado, hay una gurús que sirven de ejemplo y a las que siguen las masas.
Lidia señala varias en su libro pero se queda con dos. Por un lado Amaya Méndez, “hay postureo en su perfil pero es una chica muy honesta y es una profesional del deporte y la nutrición, profesional porque ha sido atleta y está formada. Me parece de las más profesionales y serias”.
En el terreno internacional “me llama la atención Tracy Anderson porque sus entrenamientos deben estar muy basados en la danza. Solo cuelga vídeos de los calentamientos porque seguir sus entrenamientos en streaming cuesta una pasta y me llama la atención por su estética de bailarina clásica, no es una estética tan deportiva”.
Hay muchas y cada cuál ha de elegir aquellas con las que más se identifique.
Con este decálogo ya podemos empezar a convertirnos en una ‘fit girl’ si nos ha convencido el tema aunque Lidia, lo que pretendía con su libro es que las chicas que ya pertenecen a la tribu se echaran unas risas al sentirse identificadas o que una futura ‘fit girl’ tuviera claro dónde se mete.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...