Rizha, la genialidad musical más precoz de España
Rizha -pronunciado Risha- es una chica nacida en Argentina que reside desde hace años en Madrid. Esta podría ser una historia más sobre un joven talento que destaca por una propuesta musical con mucha personalidad, pero es que va más allá. En enero de este año la artista de 17 años publicó Finally, una de esas exquisitas rarezas de la música underground que ella compuso, cantó, tocó, produjo e incluso masterizó por su cuenta. Para que luego infravaloren a la generación millennial.
En cuanto me contaron su historia, me interesé y al escuchar canciones como “Edgy” o “Lost My Voice” supe que merecía la pena apoyar un trabajo que pasa por el rock garagero, el pop experimental, la electrónica o el folk. “Creo que es un disco en el que intenté hacer de todo a la vez. Estuve probando qué me gustaba más, pero sin perder una unión entre todo. Es un caos, pero muy ordenado”, me cuenta Rizha muy concentrada.
Finally es un disco conceptual que comparte en todas sus canciones una atmósfera única, entre la oscuridad, la melancolía y un sonido muy espacial. Cuando digo esto último ella se sorprende, y me confiesa que durante muchas noches de grabación dejaba de fondo la serie documental Cosmos, uno de los pilares de la divulgación astronómica, creada por el científico Carl Sagan. ¿A que alucinas tanto como yo?
Hoy estrenamos el vídeo de “Lost My Voice”, una historia animada creada por el dibujante Vincent Lecerf, que comparte atmósfera con la música de Rizha. “Él me seguía a través de las redes sociales. ¡Es un dibujante bastante guay! En uno de sus dibujos vi que uno de los personajes llevaba una sudadera con mi nombre y se lo agradecí. Desde entonces empezamos a hablar y una cosa llegó a la otra”.
Conociendo a Rizha
Rizha pasó por LOS40 Trending con ilusión adolescente pero con mucho aplomo en sus palabras, el de alguien que tiene claras las cosas. “No tuve una idea sobre cómo quería que sonara. Dejé que surgiera, y fue como quedó”, me dice quitándole peso a su hazaña. Puedes escuchar la entrevista completa en el podcast del programa.
Ese talento tan brillante y extraordinario, es algo que viene desde prácticamente su nacimiento: “Toco y compongo desde muy pequeña. Las canciones eran un diario íntimo, de ahí que componga en inglés porque mi madre no lo entendía y era una forma de esconder mis secretos. Me empecé a tomar esto en serio a partir de los 9 años, ya entonces empecé a hacer canciones y a terminarlas y ya de ahí empecé a producirlas y así terminé haciendo un disco completo”.
En la playlist que me trae al programa, comparte algunas de sus referencias artísticas más inmediatas. Genios locos como Mac DeMarco, Kid Cudi o K.Flay: “Me inspiré en un montón de artistas con un rasgo en común: Que ellos mismos hacen su música y la producen, lo que provoca mucha intimidad. Es lo mismo que intenté hacer con este disco, buscar mis propios sonidos y mis letras”.
El camino hasta Finally no fue sencillo. Tras fichar por la editorial de Universal cuando apenas tenía 14 años, el proyecto pasó de productor en productor sin encontrar una solución definitiva: “Dimos muchas vueltas, probamos muchos géneros y productores y cada uno probaba su estilo. No me terminaba de sentirme cómoda ni era lo que yo quería. Al final me di cuenta de que era por algo: Necesitaba hacerlo por mí misma. Di vueltas en sitios que no me llevaban a nada, por probar o hacer lo que se esperaba que lo hiciera”, cuenta detenidamente.
Hace poco el productor Manuel Colmenero (Vetusta Morla), me contaba que alucinó cuando supo que Rizha masterizó el disco en su habitación. La masterización es uno de los procesos más complicados de la grabación y suele hacerse en estudios profesionales ya que de ella depende la corpulencia sonora de las canciones. “Es increíble lo que hizo”, me decía Manuel. Según Rizha todo ese proceso fue tan satisfactorio como complicado: “Fueron muchas madrugadas sin saber dónde estás, haciendo cosas raras y después las escuchas y dices «¡Pues funciona!». En realidad es la mejor parte de todo esto: Sentarte, crear y dejar salir las cosas”.
Hace pocos días que Tamara Ronchese, la brillante adolescente detrás de este proyecto musical, terminó el bachillerato. Los próximos planes que tiene junto a su inseparable y jovencísimo padre son seguir tocando y apostar por la proyección internacional que tiene el proyecto. Eso llevará a Rizha a tocar de aquí a fin de año en países como Japón, Italia, Alemania, Bélgica, Inglaterra, Escocia, Francia e Irlanda.
Si la quieres ver en España, su próxima fecha es el 1 de julio en el escenario de Plaza España del World Pride Madrid 2017. Te aseguro que no habrás visto nada igual.