Cuando ocurre una gran catástrofe natural pueden pasar dos cosas. Puede que salga el mejor lado de las personas, la solidaridad, el ayudarse unos a otros... O puede que surja una faceta más oscura. El egoísmo, el abandono, la falta de empatía... Desgraciadamente tras el huracán Irma hubo muchos casos que nos recuerdan más bien al segundo.

Un artículo publicado por El País repasaba esa falta de solidaridad entre muchas personas. Por ejemplo, hoteles que solamente rescataban a sus clientes, ricos que presumían de escapar en jet privado, empresas que triplicaban los precios de los servicios básicos... Vamos, una vergüenza.

Una de las personas que sufrió este desastre en primera persona fue Lidia Torrent. La camarera de 'First Dates' estaba en La Habana y nos fue informando a través de su Instagram de todo lo que estaba viendo.

He dudado mucho en si escribir algo pero quizás a alguien le pueda interesar cómo se está viviendo todo desde aquí. Y si no, me sirve a mí de desahogo. Ayer nos desalojaron del hotel donde estábamos hospedados en Cayo Santa María. Por suerte tenemos coche y junto a unos españoles que conocimos días antes en Trinidad, pusimos rumbo a La Habana. Retrocedo un momento porque recuerdo cómo el socorrista de la playa con el que hicimos amistad, hacía fotos a todo porque no sabía cómo se lo iba a encontrar la próxima vez que lo viera. Al llegar al hotel de Habana, ponemos las noticias y vemos imágenes de inundaciones. Nos entró claustrofobia al pensar que podríamos quedar atrapados en Cuba si el aeropuerto sufre daños como los de la isla de San Martín. Hablamos con nuestras madres y nos recuerdan que compremos agua y provisiones, y así hicimos. Fue extraña la sensación en el supermercado porque parecía una película del fin del mundo. Sin ánimo de dramatizar, pero era mucha la gente que vaciábamos las estanterías porque no sabemos qué va a pasar estos días. Estamos bien. Aquí hace buen tiempo. Es raro porque estamos tranquilos pero con mucha incertidumbre porque las previsiones cambian de una hora a otra. Así que habrá que tener paciencia porque tenemos el vuelo de vuelta el domingo por la noche. Me entristece profundamente lo que ha dejado el Irma a su paso y sólo deseo que los daños sean los menores posibles porque, al final, yo estoy aquí de paso pero la gente autóctona sufre por su país, su casa, sus cultivos, sus trabajos, su seguridad... ✨💫

Una publicación compartida de Lidia Torrent Anca (@lidiatorrentanca) el 8 de Sep de 2017 a la(s) 6:19 PDT

Lidia nos ha explicado en Anda Ya que había mucha falta de información. ''Las aerolíneas no nos ayudaban nada. Los teléfonos siempre estaban comunicando''

Sentías que nadie te echaba una mano

Lidia Torrent

Ella y su pareja, Matías Roure, conocieron a un grupo de españoles con los que viajaron juntos hasta La Habana. Y menos mal porque si no quién sabe qué les podría haber pasado. Reconocen además que tenían un sentimiento raro: ''te crees que nunca te puede pasar a ti''.

Después de conocer la experiencia de Lidia, la moraleja que deberíamos sacar está muy clara. Es inadmisible que cuando ocurre una catástrofe natural como el huracán Irma no estemos a la altura de la situación. Tenemos que sacar lo mejor de nosotros y, por supuesto, ayudar a los demás.

Lidia Torrent creía que a ella nunca le podría pasar algo así...

La camarera de 'First Dates' ha vivido una de las experiencias más duras de su vida

Webs de PRISA