Jorge Javier Vázquez se dedica a responder a sus haters, ¿qué le ocurre al presentador?

El pasado viernes noche Jorge Javier Vázquez estuvo respondiendo a varios tuits que criticaban su labor en GH Revolution. Con sorna, con ironía, con el humor que suele usar él en sus programas pero a veces, "entre broma y broma, la verdad asoma".

Pocas veces un presentador se dedica a ir contestanto uno a uno los comentarios negativos que le dedican. Porque suelen preferir mantenerse al margen, suelen intentar no leerlos y hasta ignorarlos.

Pero somos humanos, y por alguna razón, a veces pesan más las críticas que los halagos. Por ello, muchas estrellas televisivas llegan a borrarse de las redes para evitar hacerse daños.

'Gran Hermano' se ha convertido en su mayor regalo envenenado

De hecho, Jorge Javier seguro que está acostumbrado a las críticas. Hace años que es el presentador más valorado de Mediaset y eso le convierte en el foco principal de los comentarios, para bien o para mal.

Pero desde que le ofrecieran conducir 'Gran Hermano' tras la marcha de Mercedes Milá, parece que esto se ha convertido en un regalo envenenado para él. Si el año pasado estuvo en el punto de mira de los seguidores del reality, esta edición "Revolution" parece que le está sacando de sus casillas.

El programa está marcando mínimo histórico de audiencias, desde su primera gala, hasta la segunda y el Debate. Y no todas las quejas de los seguidores apuntan al presentador, también a la mecánica, a los cambios de este año y, sobre todo, a la decisión de Mediaset de quitar el Canal 24 horas.

Y todo eso sumado parece que ha hecho explotar a Jorge Javier. Por primera vez ha tenido la necesidad de dedicar una noche a defenderse. Claro que había respondido en otras ocasiones, pero no le habíamos visto centrarse durante horas a escoger los comentarios más hirientas para dar explicaciones.

¿Los resultados le están afectando realmente?

Quizá ahora sí se ha sentido juzgado, atacado y en vez de mantenerse al margen, ha preferido dejarse llevar por su parte más emocional. Totalmente lícito. Pero ¿por qué ahora? Puede que las críticas anteriores fueran más superficiales, y en esta ocasión sí sienta, por primera vez, que está sustituyendo a alguien (Milá) y no haya dado la talla.

Acostumbrado siempre a ser el primer presentador, a que le sustituyan a él, a que le llamen a él para subir las audiencias: estos datos, este formato, y los resultados quizá le estén haciendo perder la paciencia y la seguridad.

Veremos lo que ocurre con el tiempo, las conclusiones futuras que haga y que seguramente compartirá, porque si algo bueno tiene Jorge es que todo lo acaba transmitiendo y compartiendo con su público.