iPhone X: Ya estaban tardando en destrozarlo
¿Por qué a la gente le da por romperlos nada más comprarlos?
He de reconocer que me pasé buena parte de este pasado fin de semana pensando en hacer un reportaje sobre tecnología en el que me iba a preguntar por qué aún nadie había destrozado su iPhone X.
Se me habían ocurrido diferentes pruebas de resistencia para el nuevo sistema de Apple como utilizarlo con las manos después de haber comido bolsa de gusanitos naranjas de los gordos, pasarle por encima con un camión de 18 ejes, usarlo de relleno de una lasaña o probar a que un futbolista le diera una patada y lo empotrara contra una pared...
Pero por suerte para mí, el equipo de CNET me ha facilitado el reportaje ya que hace un par de días sometieron al iPhone X a uno de esos test que tan virales se vuelven.
LOS40
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El objetivo de esta web era probar cuánto resistirían las superficies del iPhone X (hay que recordar que ahora la parte trasera del móvil es de un material similar al cristal para facilitar la carga inalhámbrica).
El resultado fue una pantalla rajada, como era de esperar, al primer contacto del teléfono con el suelo. ¿Qué raro no? Lo raro es que sigan haciendo experimentos así con un dispositivo que vale más de 1.200 euros y cuyas reparaciones superan ampliamente los 300.
Ahora que alguien ya ha comprobado que si el iPhone X cae al suelo se rompe por diferentes sitios, voy a ir pensando desde qué edificio poder tirarlo para que 1.200 euros se desintegren en un segundo pero quede un vídeo de lo más viral... ¡Rayos, también se me han adelantado!
