Mucho antes de Taylor Swift este era el squad de moda en Hollywood

Las llamaban "La santísima trinidad"

No, Taylor Swift no fue la primera en tener su squad de amigas. Para nada. En los 2000, tres celebrities protagonizaban portadas con sus juergas. Eran las chicas malas de Hollywood y sus andanzas la comidilla de todo el mundo.

Lindsay Lohan, Britney Spears y Paris Hilton eran las jóvenes de moda más aclamadas en los 2000. No necesitaban followers en Instagram (no había de eso) ni mostrar su amistad en redes sociales. Su escaparate eran los paparazzi, que las perseguía a diestro y siniestro por Los Ángeles. Pero eso no era motivo, ni mucho menos, para que ellas no pudiesen salir a divertirse un rato.

Pero, ¿cómo llegó a fraguarse esta amistad? La princesa del pop acababa de divorciarse de Kevin Federline y para distraerse un poco decidió salir con la reina de las fiestas del 2000: Paris Hilton. Sí, la rica heredera fue su compinche a la hora de olvidarse de su matrimonio y comenzar una nueva etapa. Eso sí, no fue el mejor momento de Britney. Bueno ni de Paris ni de Lindsay.

Las celebrities, que no había día que no aparecían juntas en las revistas, comenzaron a ser conocidas como “la santísima trinidad”. De hecho, el pasado mes de noviembre, Paris recordaba aquella época con una foto en Twitter.

Una foto que, diez años después, podemos decir que ya pertenece a la cultura pop. Lindsay, la actriz adolescente de moda; Britney, la estrella del pop del momento; y Paris Hilton, la heredera más mediática de aquella década, juntas justo antes de tocar fondo.

Pero la foto tiene su historia. Y es que Lindsay Lohan no estaba invitada a salir aquella noche con ellas. "En realidad solo íbamos a salir Brit y yo. Luego Lindsay nos persiguió hasta el coche y entró. No fue invitada", dijo Hilton en una entrevista para MTV Australia.

Lindsay y Paris, como buen drama adolescente, se comportaban más como enemigas que como amigas. De hecho, se lanzaban pullitas a través de la prensa antes de empezar a salir juntas de fiesta. Finalmente, empezaron a llevarse bien. Quizá porque eran demasiado parecidas.

Los años que llegaron después no fueron los mejores para ninguna de ellas. La carrera de Lindsay cayó en picado y con ella su fama; Britney Spears entró en rehabilitación; y Paris Hilton entró en la cárcel durante un mes por violar su libertad condicional.

Por suerte, estas chicas malas supieron reinventarse y hacer frente a sus problemas. Ahora, ya entradas en la treintena, viven una vida aparentemente más tranquila. Eso sí, hace tiempo que no protagonizan una foto juntas. ¿Echamos de menos a la santísima tranidad y a las chicas malas de Hollywood?

Alberto Palao

Periodista musical. Me gusta comer burritos y...