Especial
¿Seguro que no tienes una mutación genética? Compruébalo
Para verificar alguna de ellas, necesitarás un espejo
¿Eres consciente de que quizá tengas una mutación genética y no te hayas dado cuenta? Hay muchas que son tan habituales que afectan a muchísimas personas.
Estas son algunas, que recoge The Independent:
La habilidad de beber leche
Hace unos 10.000 años, cuando los europeos comenzaron a domesticar animales como las vacas, una mutación en el gen MCM6 provocó que las personas produjeran la enzima lactasa. Esto les permitió beber la leche de vaca.
Ahora damos por hecho que muchísimas personas pueden beber leche sin problemas, pero esa 'habilidad' es en realidad una mutación.
La ausencia de las muelas del juicio
Las muelas del juicio son un pesadilla, especialmente si requieren una operación. Y, además, normalmente son completamente inútiles.
Son, en realidad, una reminiscencia de nuestros antepasados, que tenían molares más grandes para poder masticar algunos productos muy duros que formaban parte de su dieta.
Nuestras mandíbulas son más estrechas y, por eso, nuestra especie ha empezado a evolucionar eliminando en algunos casos estas muelas.
Cerca del 40% de los asiáticos y entre el 10 y el 25% de los estadounidenses de ascendencia europea y el 11% de los afroamericanos carecen de, al menos, un tercer molar.
Así que, si no tienes muelas del juicio, no te sientas mal. Se cree que la mutación comenzó hace unos 350,000 años.
El pelo rojo
Es una de las mutaciones más conocidas. Únicamente entre el 4 y el 5% de las personas tienen esta mutación, que es mucho más probable en el norte de Europa. Algunos están preocupados porque el gen regresivo podría estar desapareciendo.
Los ojos azules
El cambio que llevó al 8% de la población mundial a tener ojos azules ocurrió hace relativamente poco: hace entre 6.000 y 10.000 años.
La primera persona de ojos azules en la historia probablemente vivió en Europa.Se produjo debido a una variación genética de un gen ahora llamado OCA2, que cambió la cantidad de pigmento producido por diferentes individuos, lo que permite la aparición de diferentes tonos de marrón y, finalmente, otros colores.