Especial
Las 6 claves que hacen de 'Call me by your name' una película perfecta
Porque el amor es un tema universal
Todo el mundo recuerda la primera vez que se enamoró. Todo el mundo recuerda la primera vez en la que se enamoró y fue correspondido. Y, por norma general, todo ello sucedió en verano.
Luca Guadagnino (Palermo, 1971) ha querido trasladar todo ese torbellino de sensaciones, las del primer amor, a Call me by your name, una de las películas más especiales de cuantas se produjeron en 2017. En España se estrena el 26 de enero.
La película es una adaptación del libro homónimo de André Aciman – que ha conseguido su correspondiente nominación al Oscar por su adaptación de James Ivory – con las licencias propias que otorga el cine. Para empezar, la localización, pues aquí la historia se ha trasladado a Cremona, un área dentro de la Lombardia, en donde el director pasó su propia adolescencia y lejos de la costa italiana en donde se situaba la original.
La narración resulta absolutamente conmovedora y consigue que el tema que más polémica ha suscitado de todos los que rodean esta producción – que la historia que narra sea la de un chico de 17 años y un hombre de 24 – quede en un segundo plano porque, aunque suene a cliché, el amor es un tema universal. Y el romántico será un constructo social pero nos encanta experimentarlo.
Estas son las seis claves que hacen de Call me by your name una película perfecta:
La historia:
El guion, la adaptación del libro en el que está basada, vaya. En él se cuenta la historia de Elio, un chaval de 17 años que pasa sus veranos junto a su familia en una casa en medio de la campiña italiana. Su padre, un catedrátivo universitario de arqueología, recibe cada año a uno de sus estudiantes más brillantes de último curso. Será entonces cuando Elio conozca a Oliver. Todo ello salpicado por esa Italia brillante de 1983.
El elenco:
Timothée Chalamet es Elio y es el absoluto protagonista de este largometraje – ha sido nominado en la categoría de mejor actor en los Oscars 2018 por este papel – lo que lo convierte en la presencia joven más explosiva de los últimos años con papeles en la también aplaudida Lady Bird o en la próxima película de Woody Allen. Armie Hammer es Oliver. Michael Stuhlbarg es Mr. Perlman, el padre de Elio. Amira Casar es Annella Perlman, la madre de Elio. Esther Garrel es Marzia. Victorie de Bois es Chiara. Todos ellos hacen de la narración de la historia un conjunto redondo y la química entre los elegidos es más que evidente.
El director:
Luca Guadagnino parecía destinado a convertirse en uno de esos regidores para los que prima la estética por encima de ningún otro factor en sus obras. Io Sonno l'Amore, con Tilda Swinton como protagonista, supuso su despegue como director fuera de Italia. Cegados por el Sol, también con Tilda junto a Dakota Johnson y Ralph Fiennes, su consagración como director que decide donde queremos ir de vacaciones. Ahora Call me by your name lo ha llevado de gira por todas las entregas de premios a lo mejor del año desde que estrenara en el Festival de Sundance de 2017 hace prácticamente un año. Y ha demostrado que puede hacer algo más que elegir localizaciones impactantes y vestidos suntuosos. Bastante más.
El norte de Italia:
Esta película no hubiera funcionado igual si hubiera sido grabada en viviendas de protección oficial a las afueras de Madrid, obviamente. Lombardía, la región de Cremona y el lago Garda consiguen que el espectador sienta las omnipresentes moscas que se arremolinan alrededor de los protagonistas a lo largo del metraje.
La música:
Y no lo decimos nosotros, lo dice también The Academy que se ha decidido a nominar a Sufjan Stevens por su tema Mystery of Love al Oscar a mejor canción. La recopilación de tonadas que suenan a lo largo de la película van desde el de Detroit hasta las canciones más divertidas del italidisco como Paris Latino o composiciones de Ryuchi Sakamoto. A fin de cuentas el verano es el verano y los bailes en el chiringuito del pueblo no te los quita nadie. Y menos si estás en 1983. Los guiños a la música son continuados a lo largo de este trabajo hasta en la ropa de los protagonistas.
La sutileza:
La película ha recibido algún que otro golpe desde que se proyectó por vez primera. Las asociaciones conservadoras pusieron su grito en el cielo por un guion que se centraba en una historia de amor entre dos chicos. La comunidad LGTB por la esterilización del sexo gay que se ha llevado a cabo en el metraje. Calificaciones por edades aparte, la película prefiere hacer hincapié en el amor y los sentimientos antes que mostrar un sexo más o menos explícito que la mayoría de espectadores saben como funciona. Sin escenas de alto voltaje – o eso lo dejamos a la percepción del espectador porque algo hay – la película consigue en muchos momentos un erotismo, imaginamos que pretendido, que se echa mucho de menos en el cine de rápido consumo. Y eso es de agradecer.