‘Facial de pene’, el polémico tratamiento que han compartido Sandra Bullock y Cate Blanchett
Su creadora se explica
En esto de la belleza cada día descubrimos nuevos tratamientos que innovan en productos, aplicación o resultados. Y cuando parece que ya poco puede sorprendernos porque hemos visto de todo, llega el ‘facial de pene’ que ha dado la vuelta al mundo en estos días.
Todo empezó cuando Cate Blanchett estaba por Australia promocionando Ocean’s 8 y habló de un día de spa que había compartido con su amiga y compañera de reparto, Sandra Bullock.
“Sandy Bullock y yo vimos en Nueva York a esta experta en tratamientos faciales, Georgia Louise, que nos ofreció, lo que nosotras llamamos, un ‘facial de pene’”, explicó en la edición australiana de Vogue, “no sé lo que es y si se llama así sólo porque huele un poco a esperma, tiene una enzima…”.
La noticia sobre este tratamiento empezó a dar la vuelta al mundo y a generar cierta polémica hasta el punto de que Vogue Australia decidió eliminar estas declaraciones de su información original sin dar más explicaciones como señalan muchos medios como Hollywood Reporter.
Ha sido la esteticista la que ha tenido que salir al paso para explicar en qué consiste realmente este tratamiento que, en realidad, se llama EGF.
“Ocurrió el año pasado cuando Sandra Bullock estaba rodando en Nueva York y vino a verme para una limpieza profunda y para darle un brillo duradero en el rostro”, explica, “quería darle algo que transformara su piel sin la necesidad de someterse al láser, así que le hice algo a medida para que obtuviera esos resultados duraderos”.
Y parece que funcionó porque como cuenta la esteticista, “en cuestión de semanas su maquilladora, Whitney, y sus compañeros de reparto querían saber cuál era la razón por la que tenía un increíble y duradero brillo en la piel. A partir de ese momento nació el Hollywood EGF facial”.
El problema es que el origen de ese producto está en las células madre del prepucio de un bebé que se recogen durante la circuncisión. Eso ha provocado una serie de críticas por utilizar bebés para elaborar productos de belleza.
Ante las informaciones que estaba circulando sobre el tema, a la esteticista no le ha quedado más remedio que aclararlo todo. “No se usaron bebés, sólo se clonaron las células hace años. El facial incluye una limpieza, seguido de un peeling TCA intensivo, una máquina de micro agujas y una máscara electrizante para calmar la piel seguido de mi secreto suero EGF (Factor de crecimiento epidérmico)”, explicaba en Instagram, “no estamos utilizando células madre originales, solo clonamos. Las células madre se entregaron a un banco de células madre en Corea que tienen el banco más grande el mundo para ayudar a generar colágeno y elastina”.
Por lo visto, el tratamiento está muy solicitado y hay una lista de espera de dos años y eso que cuesta 650 dólares.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...