Ashley Graham lanza la campaña más audaz para vender bañadores
Las fotos de paparazzi que otros no querrían ni ver
Ni Photoshop ni poses estudiadas, la modelo e icono plus size Ashley Graham ha tirado por el camino del medio para promocionar su nueva colección de bañadores y ha utilizado fotografías que pocas celebrities quieren ver.
Se trata de robados de los paparazzi en sus días de playa en los que siempre luce sus propios diseños. Una forma como otra cualquiera de defender una realidad.
Y es que en la campaña podemos ver celulitis e imperfecciones que en cualquier otra marca hubieran tenido que ser retocadas con Photoshop.
La modelo vuelve a convertirse así en un referente del movimiento body positive y anima a las mujeres a lucirse tal y como son.
Una forma de lo más positiva para afrontar el verano que ya llega.