Estas son las dos primeras ciudades españolas con pasos de cebra 3D

¿Es alguna de ellas la tuya?

Hace poco menos de un año, el pequeño pueblo pesquero islandés de Ísafjörður ocupó páginas en los medios de todo el mundo al instalar un paso de cebra tridimensional en uno de sus barrios.

El cruce estaba pintado en el suelo, pero provocaba una ilusión óptica, de tal forma que parecía flotar en el aire. De esta forma, obligaba a los conductores a frenar de forma instintiva.

Ahora el sistema ha llegado a España de la mano de las localidades de Almussafes (Valencia) y Villarreal (Castellón), que han pintado los primeros pasos de cebra 3D del país.

"La experiencia tridimensional es la que asegura que los conductores tengan la sensación de ver entre 3 y 5 bloques, en función del ancho de la calle, como si de un paso elevado se tratara", asegura el Ayuntamiento de Almussafes.

El mismo organismo afirma que estos cruces son, además, antideslizantes, reflectantes e impermeables al gasoil y aceite. Según asegura el Consistorio, esta señal resulta "mucho menos invasiva que los otros tipos de reductores de velocidad en el mercado, como badenes o cojines berlineses".