Octopath Traveller
El RPG que necesitas en tu Switch
Para un nutrido grupo de fans de los juegos de rol, la era de la Super Nintendo representa un estándar dorado de este género. La nostalgia puede jugar un alto porcentaje en ello, pero no se puede negar que los 16 bits tenían un "no sé que" añadido a sus cualidades generales.
A Square-Enix no le vamos a enseñar ahora como hacer RPGs, teniendo en Final Fantasy VI y Chrono Trigger como exponentes máximos del genero en los 90, así que este Octopath Traveller viene bendecido de fábrica, pero hay que ver si captura la misma magia de antaño.
Lo primero que salta a la vista en Octopath Traveller es su estilo gráfico, parece bastante simple, pero como nada que hayamos visto. Square ha aplicado el Unreal Engine 4 a unos sprites 'a la antigua', creando un mundo que combina polígonos con escenarios bidimensionales de la vieja escuela.
A muchos les recordará a esos libros que teníamos en la escuela que al pasar las paginas descubríamos formas en relieve. Este estilo diorama resulta muy bonito de ver, y ya sus desarrolladores probaron algo parecido con Bravely Default, pero sin llegar a estos niveles de calidad.
Pero en un juego no podemos conformarnos con que nos evoque a juegos míticos de la juventud, y que el único avance sea aprovechar la mejora tecnológica por los años que han pasado. Veamos que más nos ofrece.
El concepto narrativo es el que sigue, disponemos de ocho héroes con los que iniciar nuestra aventura, cada uno con su objetivo que cumplir. El diario del juego recoge nuestro progreso individual en cada una de las ocho historias. Estas historias normalmente no entran en conflicto entre ellas. Habrá momentos en los que los personajes acaben viajando juntos, eso sí, ayudándose mutuamente en sus metas finales.
Si ponemos un 'pero' aquí es que esos encuentros cruzados parecen más el resultado de "tenemos ocho personajes y hemos de reunirlos porque es lo que ha que pasar", que otra cosa.
No obstante, el juego es muy largo y aún tenemos pendiente descubrir si todo forma parte de una historia entrelazada, como Square ya ha hecho en el pasado con varios de sus títulos.
El juego empieza con la elección de personaje, pero es posible experimentar las ocho historias en una misma pasada, en vez de tener que acabar una para empezar la siguiente.
La dificultad del juego se va adaptando según en qué momento nos vayamos encontramos con otro de los personajes principales. No será igual enfrentarnos a un jefe yendo solos al principio de la partida, que si ese mismo encuentro lo hacemos teniendo ya un equipo completo.
Uno de los aspectos mejor trabajados son los personajes, los ocho tienen una personalidad definida, bien diferenciada de los demás, igual que con un objetivo final único.
Ophilia por ejemplo, es una clériga en una misión sagrada para permitir a su hermana ver a su moribundo padre; mientras que Therion es un ladrón al que unos criminales están obligando a hacer su trabajo sucio. No son la alegría de la huerta en general, pero se les acaba cogiendo cariño.
Cada uno de ellos tiene una habilidad especial, que les permite interactuar con los NPCs (personajes no jugables) que se van encontrando, uno puede retarlos a combate mientras que otro puede robarles sin que se den cuenta, por poner dos ejemplos. Pero estos riesgos, de fallar, bajarán nuestra reputación en la ciudad.
Por supuesto, batallas por turnos; la mecánica de combate se enfoca en la idea de aprovechar las debilidades de los enemigos, para aturdirlos y hacer incluso que pierdan turnos de ataque. La estrategia para decidir si centrarse en un objetivo o ir repartiendo entre todos nos dará muchas veces la victoria.
Cada elemento del juego se combina para crear una mezcla fresca dentro del género, y si bien canaliza el espíritu de viejos clásicos nunca parece una copia. Es más una evolución que un simple abuso nostálgico.
Así que este Octopath Traveller es recomendable para cualquier tipo de jugador, tanto el que quiere rememorar viejos laureles como el que quiere una experiencia totalmente nueva.