Especial
Pocophone: bueno para ti, bueno para tu bolsillo
Xioami toca tierra y llama la atención del resto.
Vuelve a ser posible comprar última tecnología a un precio moderado.
Xiaomi, el gigante chino, ha descubierto un hueco en el mercado que no podía quedar sin cubrir. Entre los teléfono baratunos y los caros hay margen de maniobra. Casi sin darnos cuenta, con los años, los teléfonos de gama alta se han plantado en precios que rondan los 700-900 euros (y más caros) y la oferta tecnológica siempre se puede apurar.
Pocophone es la propuesta de Xioami para salvar este problema. La pretensión es diferenciar mucho y bien entre lo necesario y lo prescindible, para montar un teléfono con el mejor hardware posible dentro de un precio que no destroce tu bolsillo.
Por ejemplo, el policarbonato; el plastiquete… Nos hemos acostumbrado a cuerpos de aluminio y cristal que aportan un acabado muy ‘elite’ y que, sinceramente, no todo el mundo necesita. Mucha gente prefiere más ram o un mejor procesador a un cuerpo de cristal que, además, puede romperse y desmejorarse con gran facilidad.
La pantalla OLED… ¿es impresincible? Bueno, si usas el móvil para ver películas como única fuente porque vives en una cueva con cobertura es posible que sí. Pero si tienes una tele y un ordenador, un panel IPS LCD en el móvil es más que suficiente. Pierdes algo del ángulo de visión, pero el móvil se mira de frente, ¿no?
Otro ejemplo, el NFC. La conectividad NFC para pagar con el teléfono o pasar archivos entre terminales es algo que usamos poco o nada. Xiaomi ha pensado que Pocophone no lo necesita y es un gasto que elimina.
¿Qué tienes a cambio?
Fácil. Procesador de última generación, 6 GB de RAM (u 8 si sueltas algún euro más), 6.18” de pantalla, Doble SIM, una cámara selfie de 20MP,una doble cámara tremenda que podría valer para un teléfono de 700 euros sin ningún problema y una batería de 4000 mAh que te permitirá olvidar que tienes que cargar el teléfono (que, además, viene con cargador rápido, no como otros…).
La broma son 300 euros que, si lo piensas, es la cuarta parte de lo que cuesta el iphone XS al que planta cara. La cuarta parte de precio te da un teléfono un poco más feo, sí, pero más batería, la misma RAM (o algo más si aprietas), una cámara (suponemos) algo peor y, además, cargador rápido y un puerto mini-jack para tus cascos.
Vaya, que el mundo es muy grande y hay sorpresas para todos los bolsillos. El círculo ‘premium’ se cierra poco a poco. Nunca faltarán los móviles de precios astronómicos, pero es bueno saber que todo el mundo va a tener acceso a “lo último” haciendo pequeños sacrificios.