Guía de supervivencia para la cena de empresa

Infidelidades y pistolas en las cenas de empresa más locas de los andayeros

Llega diciembre. El mes de la navidad, los regalos, la semanita de vacaciones... El mes de los gastos, de tu cuñado el pesado y de las temidas cenas de empresa. No hay parte buena sin parte mala, y ese es uno de los momentos más temidos de la Navidad. ¿Te tocará sentarte al lado de tu jefe? ¿La liarás en la post-cena? Todo puede pasar en una cena de empresa. 

En Anda Ya nos preocupa la cena pueda contigo. Por eso vamos a darte unos consejitos para que no la líes más de la cuenta. ¿Está al caer y no sabes muy bien cómo comportarte? Pues lee con atención. 

- Llega pronto y elige estratégicamente donde sentarte. El sitio en la cena podría marcar toda tu noche. La cosa puede cambiar mucho. Imagínate la diferencia entre sentarte al lado del que mejor te cae de tu empresa, o al lado de tu jefe al que todos odiáis. La solución para que no te pase lo segundo es llegar pronto.

- Cómo vestirte. Es una cena de empresa, no una reunión, ni un día normal de oficina. Lo normal es que sea algo más informal de lo normal. Así que, elige algo con lo que te sientas cómodo. Sin llamar mucho la atención porque, al fin y al cabo, siguen siendo tus jefes y tus compañeros.

- Temas de conversación que evitar. Está claro, no hables ni de religión ni de política. Son los temas que más separan y no te vendrá bien. Elige temas comunes, cosas de las que a todos les guste hablar. Viajes, hijos, anécdotas... Facilito. 

- La comida. Seas escrupuloso o no, pruébalo todo. No digas que no a nada porque vas a quedar mal. Aunque veas que no te va a gustar mucho, pruébalo.

- El alcohol. Este es uno de los puntos más importantes. No te pases. Mantén el control en todo momento. Aunque parezca un ambiente festivo, estás en un lugar de trabajo, así que no se te puede ir de las manos en ningún momento.

- Parejas y ligues. Lo más normal es acudir a la cena solo. Es un ambiente en el que seguramente tu pareja se aburra y no pinte nada. Se hablan de cosas relacionadas con el trabajo, de anécdotas que os han pasado juntos... No merece la pena. Por otro lado, ojo con ligar con alguien del trabajo. Lo mejor es que lo evites. No es el lugar ni la persona. Piensa que luego tendrás que verla todos los días... ¿De verdad merece la pena? 

Si con estos tips no te ha ido bien, no tienes arreglo. Y ya, para acabar de entender todas las cosas que pueden pasar, escucha las llamadas de nuestros oyentes, que nos han contado las situaciones más surrealistas vividas en cenas de empresas.