Llantos, gritos y carcajada final en la mejor broma de San Bernardino
Nuestro oyente vive una verdadera montaña rusa de emociones ¡Menudo regalito!
undefinedLuis M. Ortiz
Imagínate que te llama un tal Alfredo Minador y te dice que tu mujer se ha dado un golpe con un coche, pero que después se ha dado a la fuga.
Para empezar, flipas un poco porque, aunque sabes sobre el golpe, estás seguro de que nadie se ha dado a la fuga. Te pones nervioso, te calientas y se lía. Eso es lo que le ha pasado a la víctima de la broma de San Bernardino.
La discusión ya empieza acalorada por esa supuesta fuga. Pero claro, enseguida empeora cuando San Bernardino insinúa que a su mujer le dieron el carnet en la tómbola y le empieza a llamar ''Caminito''.
El enfado llega a tal punto que llama a su mujer llorando de lo desesperado que está... Escucha como acaba porque al final acabarás llorando, pero de emoción. ¡Menuda montaña rusa!