Especial
Super Smash Bros Ultimate es compra obligada
La Switch de Nintendo cada día es un poquito más imprescindible.
El catálogo de Switch sigue creciendo. Sin haber tenido un 2018 demasiado cargado por parte de la gran N, nos hemos plantado en Navidad con un catálogo general riquísimo. Parte nutrido por juegos creados para la máquina, pero otra gran porción abastecido por juegos que no tuvieron su merecida atención bajo el hardware de Wii U.
Así, Nintendo ha aprovechado para sacar excelentes conversiones de juegos como Mario Kart o Donkey Kong, a los que poquita falta les hacía ser alterados lo más mínimo. El caso de Smash Bros. es diferente, podría haber salido tal cual, sí, pero Nintendo aquí ha querido mojarse, celebrar por todo lo alto el éxito de su franquicia de lucha y sacar el juego “definitivo”.
Super Smash Bros. Ultimate es un “juego perfecto”; tiene todo lo necesario para entretener al que coge el mando en busca de una partida rápida, capacidad suficiente para convertirse en un juego de estudio y entrenamiento si uno decide tomárselo en serio a nivel competitivo y un modo para un jugador capaz de entretener durante largas, largas horas.
Para empezar, el juego llega con un puñado de personajes que puede contarse con los dedos de la mano e insta al jugador a sacar a los más de 70 restantes… Sí, son más de 70. SSBUltimate reúne a todos los personajes que han pasado por la franquicia y de paso recopila también todos los escenarios (hablamos de más de 100). “Todos” quiere decir “todos”; no falta Sonic, Solid Snake, Cloud… no importa de quien sea la licencia, si alguna vez pisó un escenario de Smash, está ahí.
Además, porque no puede haber juego nuevo sin personajes nuevos, este “Ultimate” recibe en su plantel a personajes como Inkling (de Splatoon), Ridley (la bestia de Metroid), Simon (de Castlevania), King K. Rool (de Donkey Kong), Isabelle (de Animal Crossing), Incineroar (de Pokemon) y Planta Piraña (el primer DLC, gratuito si compras el juego antes del 31 de Enero).
Además, el juego introduce el concepto de “Luchadores Eco”, o lo que conocemos como “skins” desde que el mundo es mundo. Son luchadores prácticamente calcados a alguno ya existente que modifican sensiblemente los movimientos y tienen un aspecto totalmente diferente; entre ellos Dark Samus de Metroid o Ken de Street Fighter.
Para desbloquear personajes tendréis que pasar un buen rato delante de la pantalla. La forma fácil y rápida es jugar al modo “Smash” (versus) y esperar a que la máquina os desafíe con un nuevo personaje (ocurre bastante a menudo); ganar ese desafío incorporará a vuestro rival al plantel.
La forma larga y bajo mi punto de vista la más atractiva si no tienes prisa (ni quien te la meta) es emprender el largo camino del modo “Espíritu”; un enorme tablero lleno de paradas y sorpresas que plantea eso, desafíos. En este modo, además de poder llegar a casillas para desbloquear personajes de forma permanente, se incorpora el concepto de “espíritu”; son personajes que debemos entender como “cartas” y que funcionan como potenciadores para vuestro luchador, como causar más daño o impedir que el escenario pueda darse la vuelta en cierto combate. Y es que los combates de este modo casi siempre tienen alguna “condición” para añadir dificultad o poner la zancadilla de algún modo.
Todo esto para decir que, aunque no estés pagando el recientemente inaugurado modo online de Nintendo, tienes faena para rato y el periplo para un jugador de SSBUltimate puede ser largo y divertido a la vez.
De Smash hay poco que os pueda decir a estas alturas. Ya sabéis que es un juego de lucha basado en ‘plataformas’, es decir, hay que pelear y a la vez empujar y evitar caer al vacío. Para ello, tenéis un botón de golpe simple que combinado con direcciones genera otros golpes y, por supuesto, el golpe ‘smash’ que es el que, bien encajado, mandará a vuestro oponente a volar fuera del escenario si ha perdido la suficiente vida.
El juego se disfruta de verdad con el mando pro o con el mando original de GameCube si alguno lo conserva y tiene el pequeño adaptador. En todo caso, como se disfruta de verdad es con varios mandos y gente que vuelva día tras día al smash… Es así como la técnica crece y fomente la rivalidad. No hay nada mejor que dos personas frente a un televisor para jugar a un juego de lucha, por mucho online que nos presenten.
Juego, no. Juegazo. Compra obligada para Navidad si tienes una Switch, y razón de sobra para comprar una si no la tienes.