Resident Evil 2 es exactamente lo que quería que fuera

Recuerdo como si fuera ayer mi primera partida a Resident Evil 2. Está mal decirlo, pero mi Playstation tenía chip y la versión americana de RE2 llegó antes a mis manos (luego compré el original español, para aportar mi granito de arena).

Viernes de pizza, luz tenue y lo nuevo de Capcom en tu consola para que tu mente vuele por los aires. Una historia; dos puntos de vista, terror del bueno, puzles y balas que se podían contar con los dedos de la mano; pasarlo mal para pasarlo bien…

Resident Evil 2 es (con permiso de Metal Gear Solid y de cuatro juego más) lo mejor que tuvo Playstation en toda su historia. El survival horror de Capcom elevado al más alto exponente y prueba de que los videojuegos no iban a parar de evolucionar.

El progreso de la industria nos ha llevado hasta el año 2019, un impás en el que las ideas escasean y a veces piden a los creadores que se quiten la chistera y que busquen en ella para ver que truco de magia pueden recuperar para un público insaciable.

De la chistera de Capcom ha salido Resident Evil 2, el remake, 20 años después, de un juego que ha hecho historia y que ha marcado los corazones de medio mundo.

Los que trabajamos en esto no siempre encontramos tiempo para disfrutar de los videojuegos, cada vez es más difícil sacar puñados de horas libres para dedicar por recreo a lo que haces por profesión; pero hay juegos que te atrapan, por nostalgia, por su calidad, por lo que sea… te atrapan y te obligan a empezar y terminar. Te obligan a disfrutar.

Resident Evil 2 me ha llevado a 1998 otra vez. Capcom ha vuelto a construir la estación de policía de Raccoon City para que tu segunda visita (si tuviste la suerte de visitarla por primera vez hace 20 años) sea un tifón interno de emociones y te haga disfrutar como un enano.

Por si alguien ha estado en coma durante dos décadas, diremos que Resident Evil 2 es un survival horror de Capcom (género acuñado por la misma compañía) en el que las balas escasean y las llaves perdidas y puzles abundan.

La historia tiene lugar en Raccoon City, ciudad ficticia de EEUU que ya he tenido un brote localizado de zombies en una gran mansión situada a las afueras (eventos que acontecen en el primer juego de la saga) y que ahora ve sus calles infestadas.

Leon S. Kenedy es un oficial de policía recién llegado al cuerpo de la ciudad; allí se encontrará con Claire Redfield (hermana de Cris, protagonista del primer Resident) y tras un accidente de tráfico tendrán que trazar sus caminos en paralelo hasta el final de la historia.

Lo que en el juego original eran dos discos para estos dos caminos, aquí será un selector antes de comenzar la historia. Si eliges el camino de Leon primero, al acabar tendrás un “New Game 2” para seguir a Claire en los acontecimientos que han ocurrido en paralelo y viceversa. Tres niveles de dificultad para todo ello y los modos de supervivencia de Hunk y Tofu, que se desbloquean como ocurría en el juego original.

Gráficamente el juego es una maravilla, se vale del motor estrenado por Capcom para Resident Evil 7 y consigue que los escenarios pre-renderizados de Playstation original puedan ser visitados hoy con un acabado hiper-realista que quita el hipo.

Por supuesto, las famosas aperturas de puerta para cargar las diferentes estancias ya no existen. Podéis recorrer la mansión de arriba abajo las veces que queráis sin enfrentaros a molestas cargas que hoy en día nadie podría tragar.

La inteligencia artificial de los zombies es sorprendente y la interacción armamentística con sus putrefactos cuerpos también. Un zombie puede abrir puertas siempre y cuando disponga de miembros para empujar y tenga la cabeza en el sitio. Hay otros seres, como los “Lickers” que ahora son ciegos y se guían por el sonido por lo que, si tenéis la suerte de no cruzaros en su camino, podréis conseguir evitar el enfrentamiento.

La comisaria tiene un cierto número de zombies y algunas ventanas rotas por las que pueden entrar más, pero se pueden tapiar con maderas. Así que, con tiempo y con un poco de bricolaje y administrando bien las balas a la hora de disparar, podréis dejar los pasillos libres de peligro, al menos parcialmente… Nadie puede parar del todo a Mr.X, el hombre blanquito enorme de gabardina verde que os perseguirá sin tregua y cuyos pasos podréis escuchar en las habitaciones colindantes.

Dicho esto, Resident Evil 2 es todo puzle, ingenio, claustrofobia y acción pausada y agobiante, y sigue el argumento del clásico del ’98 cambian lo justo y necesario para refrescar el paseo.

El primer paseo os dará en torno a 9 horas de juego. Luego tenéis que sumar la parte de Claire que aumentará sustancialmente esa cifra y la posibilidad de invertir el orden, aumentar la dificultad y los modos de Hank y Toku. Juego no os va a faltar.

Capcom ha re-creado una obra maestra y lo mejor de todo es que tienen la herramienta perfecta para vivir del baúl de los recuerdos los próximos 5 años. Si no sacan adelante los remakes de Resident Evil 3 y Code Veronica (por lo menos) en los próximos años, es que hay un fallo de concepto enorme en sus oficinas. Hasta entonces... Compra, compra, compra y compra.