Beatriz Luengo desvela el gran secreto de Upa Dance y cuenta su anécdota con Backstreet Boys

Y de paso, presenta proyecto inédito

Tener delante a Beatriz Luengo es saber que lo que pase a continuación puede ser cualquier cosa. Bien lo saben Carolina Iglesias e Iggy Rubín que la tuvieron en YU para hablar de su actualidad y, prácticamente se pasaron todo el rato hablando del pasado.

Para empezar, Beatriz retrocedió a su adolescencia para recordar una anécdota que vivió con una amiga suya muy fan de Backstreet Boys. “Vinieron a un programa de TVE. Mi amiga y yo fuimos, horrible, no los conocimos ni nada. Pero nos dejaron entrar en el camerino y había restos de tortilla de patata y nos la comimos. Lo cutre no es comerte una tortilla que alguien se ha dejado, lo cutre es que llegué al cole haciéndome la megaguay porque me había comido los restos de uno de ellos”, relató con esa gracia que le caracteriza.

Porque sí, entre muchas otras cosas, Beatriz transmite cercanía y simpatía y de eso hubo mucho cuando recordó sus tiempos de Upa Dance, esa serie que le dio popularidad y de la que Carolina Iglesias es mega fan. “Carolina, el sudor era agua”, fue el gran secreto que reveló la cantante, “no era esfuerzo, era sudor del vaporizador. Miguel Ángel, Pablo, ¿podéis perdonarme por esto? Porque sus abdominales brillaban que eso era una cosa…”, confesó.

Y siguieron con el tema, por propia iniciativa de Beatriz, para que luego digan que no le gusta hablar de aquello. “Yo conocí a Blas Cantó. Se hizo mi mejor amigo hasta que un día me dijo 'tengo que decirte que yo odiaba a Upa porque era de RBD’… Con todo mi respeto a RBD, que además, la morenita me cae muy bien, que me la encuentro en Miami y es super maja, yo creo que no se puede comparar RBD con Upa, eran muy diferentes. RBD es más Física o Química, que es un colegio y eso”, aseguró.

“Baños mixtos, ¿qué hay más vanguardista en 2003 que baños mixtos? Si es que Upa cambió muchas mentes. Fue muy necesario”, sentenció.

Pero Upa quedó en el pasado y desde entonces Beatriz no ha hecho más que cosechar logros tanto como cantante como compositora. Y aunque no ha pasado demasiado tiempo en España porque ha dividido sus residencias entre Francia y Latinoamérica, lo cierto es que 100% de aquí, lo dice el test genético que se ha hecho.

“Yo decía ‘voy a tener de negra porque me encanta la música negra, me encanta la comida asiática y pensaba que iba a tener un 40%... y me ha salido un 90% española, con un 5% portuguesa. Me deberían dar un Premio Cervantes”, reclamó.

Pero entre tanta anécdota, también tuvo tiempo para hablar de uno de sus proyectos que va a suponer su debut. Está claro que no hablamos de música. “Llevo mucho tiempo recopilando información, es un libro que cuenta la historia de 12 mujeres de una manera determinada y, la verdad es que nunca pensé que lo fuera a editar, siempre pienso que para mí es el ‘no’ de las cosas y que yo no tenía que sacar un libro. Me da un poco de miedo el tema de que parece que te aprovechas de quién eres y, como soy muy cauta, y dentro de mi honestidad intento dar los pasos despacio…”, empezó contando.

El caso es que, aunque despacio, ha dado el paso y está trabajando en su primer libro que no es una biografía. “Me habían propuesto una biografía y dije que no porque no creía que fuera interesante y me parece que uno tiene que tener una edad avanzada para escribir su vida”, admitió.

En cuanto al proyecto en el que está trabajando confesó que “le llegó a Planeta parte de mi obra con un nombre que no era el mío. Mandé tres de mis mujeres dentro de estas 12 historias y me recibieron en Barcelona y la editora no sabía quién era yo. Salgo con Destino y estoy para atrás y adelante con los textos. El libro sale en septiembre y es un proyecto de empoderamiento de la mujer y que me tiene muy ilusionada”.

Si quieres echarte unas risas no dejes de darle al play porque Beatriz tiene anécdotas para pasar un buen rato.

Cristina Zavala

Periodista enamorada de todo el entretenimiento....