Samsung mejora el Galaxy Fold
La compañía está arreglando el desaguisado
Samsung no ha parado de trabajar en su Galaxy Fold desde que hace unas semanas cancelara el lanzamiento del que iba a ser el primero teléfono plegable. Abandonado ese objetivo, la marca coreana intenta que "a la segunda sea la vencida". Un informe nos da una idea de las mejoras que están realizando.
Parece que Samsung ha corregido aparentemente los dos grandes problemas que se habían detectado en el teléfono. El primero era la facilidad con la que polvo, arena, suciedad y demás podían entrar debajo de la pantalla, causando un daño duradero.
El segundo era esa capa protectora que la gente se veía en la necesidad de quitar, como se suele hacer normalmente cuando estrenamos móvil, a pesar de que con ella se vive mejor. Pero en el caso del Galaxy Fold quitar ese plastiquito conseguía convertir el teléfono en un pisapapeles de 2.000 euros.
La solución al segundo problema ha sido meter esa capa en el cuerpo del teléfono, de manera que quitarla no tenga un comienzo fácil. Además, para quitarnos la idea de la cabeza, la caja vendrá con un aviso de tamaño industrial. Sabremos desde el primer momento que si se nos ocurre tocar demasiado esa capa de plástico nos quedaremos sin móvil.
En el caso del primer asunto, el de las sustancias que pasan al interior del dispositivo, Samsung está reduciendo el espacio entre la parte superior e inferior de la bisagra, para evitar que cualquier elemento extraño se cuele por ningún sitio.
Esto no protege al 100% que el teléfono no vaya a coger polvo o pelusillas de ningún tipo, como hacen la mayoría de teléfonos, pero debería reducir drásticamente la posibilidades.
Parece claro, de todas formas, que Samsung debería dar una segunda pensada el diseño de la bisagra para futuros móviles plegables, en pos de asegurarse que no introduce problemas de durabilidad como estos, ya que es empezar con un lastre innecesario.
Si fuera una especie de 'beta' en la entrada al mundo plegable a la que estuviésemos invitados a participar se le podría perdonar, pero dado que el Galaxy Fold, o cualquier teléfono plegable, va a ser un objeto de lujo que supere los 2.000 euros, esos perdones no existen.
De momento las unidades mejoradas se están probando, y se espera que Samsung de una nueva fecha muy pronto, quizás antes de que acabe el mes de junio.
