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Federico Moccia: “Sofía es una bandera del feminismo porque demuestra con hechos y no con manifestaciones cómo se puede ser independiente”
Publica ‘Mil noches sin ti’
Tras el éxito de A tres metros sobre el cielo, Federico Moccia se convirtió en el autor italiano de novela romántica juvenil más aclamado en nuestro país. En 2012 publicaba Esta noche dime que me quieres. Ahora, 7 años después, lanza el desenlace de aquella historia sobre Sofía, Andrea y Tancredi.
Sofía y Andrea son un joven matrimonio que pasa por el difícil momento de asumir que, tras un accidente, él se queda en silla de ruedas. Aparece Tancredi, un multimillonario incapaz de amar a las mujeres, que cambia cuando la conoce a ella.
5 millones de euros para pagar una operación que podría conseguir que Andrea volviese a caminar a cambio de 5 días con Sofía. Esa es la propuesta de Tancredi y lo que cambiará el transcurso de sus vidas.
El trío continua su historia en Mil noches sin ti. Federico Moccia se ha pasado por España para darse un baño de masas y presentar su nuevo trabajo.
¿Notas que tu público ha crecido o sigue siendo muy joven?
Yo creo que es un público en continua evolución. Hay un grupo de personas que se mantiene pero llegan también chicas muy jóvenes, sobre todo chicas. Aunque ayer, por ejemplo, en las firmas había un señor que debía tener más de 50 años. Me gusta porque estos libros no tienen ni una razón biológica, ni de género. No tienen que ser para hombres o mujeres, tratan de momentos de vida, de reflexiones, que pueden pertenecer a unos y otros.
La música juega un papel muy importante en esta bilogía en la que la protagonista es una pianista, ¿cómo la sientes tú?
A mí me gusta muchísimo la música. Creo que la música consigue emocionarte de una forma increíble. Es un regalo que se nos ha hecho. Cada vez que oigo música, sobre todo clásica, me imagino la capacidad tan increíble que tenían los compositores para imaginar esa música con esos momentos tan distintos en los que entra cada instrumento y luego imaginarlo todo junto… Para mí es maravillosa que la música exista en nuestras vidas. Me gusta cómo podemos tener una banda sonora personal y cómo, según los momentos que vivimos, podemos hacer nuestra propia playlist.
En tu playlist actual, ¿qué música encontraríamos?
En este momento Álvaro Soler me gusta muchísimo porque es muy alegre. Le gusta a mi hijo que va a cumplir 10 años en diciembre. Es una música que está muy bien, es ligera, música pop bonita. Creo que es música de calidad. Me gusta la cara de Álvaro Soler, es simpático, sonríe siempre, es guapo. Estuvo en Italia como jurado de un talent show y creo que es una persona muy interesante y sus vídeos son muy bonitos.
Normalmente los autores presentan sus sagas en un espacio corto de tiempo. Tú tardas años en ponerles fin… ¿no es más fácil escribirlo todo seguido?
Yo creo que cada historia necesita como una decantación, como cuando sirves un buen vino y necesita oxigenarse un poco. Dime que me quieres era muy fuerte y no podía tener una continuación inmediata porque era difícil estar a la altura de esa novela.
Llevas años escribiendo sobre historias de amor, ¿ha cambiado tu concepto del amor en este tiempo?
He observado distintos aspectos del amor, pero no ha cambiado mi concepto del amor, es más, quizás se ha ampliado. He descubierto un amor que no había conocido con la llegada, en 2009, de mi primer hijo. Eso te da otro tipo de vivencia, te hace consciente de tu debilidad porque ya no eres independiente. A una mujer siempre la puedes dejar, pero a tu hijo, no. De repente sientes que yo eres una pieza única e independiente y eso crea una belleza y te da una visión de auténtica creación, la más absoluta, pero también es tu increíble debilidad.
Tancredi, uno de los protagonistas, es un millonario incapaz de ser feliz que paga su frustración contra las mujeres. Es el malo que se convierte en bueno… ¿te hubiera gustado ser él?
Me hubiera gustado ser Tancredi porque lleva una vida maravillosa, siempre viajando por el mundo, con todo lo que tiene, con la posibilidad de no tener que preocuparse del horario, del vuelo, cuándo sale el avión… porque tiene su propio jet privado. Pero no me gusta cuando él piensa que puede tenerlo todo. Sofía es la respuesta porque le ha dicho que no.
Un no que le cuesta asumir…
A mí eso me divierte mucho. Se vuelve loco porque no está acostumbrado, es un hombre muy guapo, pero con una mujer como Sofía, tienes que fijarte en otros valores y tener otras consideraciones. Me gustaría ser Tancredi pero con mi parámetro de comportamiento. Creo que desafortunadamente, en la vida, cuando te sucede lo que le sucede a Tancredi en la primera novela, que su hermana Claudine, le pidió que se quedara esa noche porque tenía que hablar con él y prefirió irse a una fiesta con una chica y la hermana se suicidó, ese momento se te queda como una cita a la que no acudiste.
¿Ese suicidio justifica todo el mal que luego les hace a las mujeres?
Digamos que nunca puedes justificar el mal que le haces a una mujer pero, en su caso, no se trata de algo respecto a las mujeres sino de su incapacidad para ser feliz. Odia el hecho de que alguien pueda ser feliz y quiere menoscabar la felicidad de los demás. Es una persona que tiene muchos problemas. Todo nace de un día de Navidad que yo estaba de paseo por Plaza Navona, en Roma, y vi a un hombre delgado, con más pelo que yo, ojos verdes, con un abrigo azul marino muy bonito, muy bien vestido, se bajó de un gran coche, y sin embargo, tenía una cara muy triste. Yo pensé que en la vida hay gente muy rica que, sin embargo, no ha sido capaz de disfrutar todo lo que tiene.
Es una novela con infidelidad, mentira, insatisfacción, drama familiar… ¿con qué te gustaría que se quedase la gente?
Estos aspectos pueden formar parte de la vida de una persona de las maneras más distintas. A veces porque se producen las pérdidas, hay dolor, las historias se terminan… lo que me gusta es el hecho de que yo veo a Sofía como la protagonista de esta película. El hecho de que en un momento determinado se remangue y vuelva a ser la dueña de su vida y descubre una fuerza que no pensaba que tenía, ese es el concepto más importante. Si no estás bien contigo mismo no puedes estar bien con otra persona. Incluso el hombre más atento y enamorado de ti no conseguirá colmar ese vacío que sientes. Hay cosas que tenemos que solucionar nosotros mismos. Y cuando lo resuelvas es cuando podrás amar a otra persona. Esto es lo que me gustaría que calara en la gente.
Dibujas a una mujer muy íntegra pero, ¿feminista?
Sofía es una bandera del feminismo porque demuestra con los hechos y no con manifestaciones cómo se puede ser independiente de ciertas situaciones, cómo se puede ser capaz de demostrar de la mejor manera, sin renunciar a la feminidad, la fuerza y la independencia de una mujer que no necesita a nadie hasta que ella no decide que ama a alguien. Me gusta la fuerza de esta mujer. Es feminista sin serlo porque una mujer feminista es como si sintiera que tiene una dificultad para que la valoren los hombres y para mí eso no ha existido nunca.
Unas declaraciones tuyas sobre el “exceso del feminismo”, han causado revuelo en nuestro país. ¿Te consideras feminista?
Si alguien me preguntase diría que sí, soy feminista, pero creo que no es necesario. A veces envidio a las mujeres por las capacidades que tienen de hacer varias cosas al mismo tiempo. Eso me fascina y me admira.
Tu protagonista reivindica la libertad sexual de las mujeres, ¿acorde a los tiempos de ahora o también lo hubieras escrito hace años?
Es una conversación que tiene con su maestra que está chapada a la antigua en su concepción de la vida. Hoy, a veces, en algunas familias, a un chico que se comporta de cierta manera, que sale con varias chicas, el padre no le juzga mal. Pero si lo mismo lo hace una hija, el padre no lo va a ver bien, no la va a juzgar igual. No creo que sea un concepto del pasado. Creo que esto es una consideración que algunos hombres tienen con las mujeres. Las ven con una concepción más pura respecto a lo sucios que se sienten ellos y piensan que la mentalidad del hombre no es la misma que la de la mujer. Pero hay que aceptarlo porque el placer del sexo es igual para un hombre que para una mujer aunque asuma formas distintas, pero entiendo que no es fácil.
¿Lo siguiente?
Me gustaría mucho hacer una película porque hace tiempo que no lo hago.
¿Con alguna de sus novelas?
No… hombre, aunque fuera de estas novelas, me encantaría porque sería maravilloso porque habría que ir a rodar por todo el mundo. Será excepcional aunque con costes muy altos. Me gustaría hacer una comedia divertida sobre los amores que nacen en los chats y redes sociales que se han convertido en una especie de agencia matrimonial moderna. Las mujeres y los hombres que han roto una relación y no tienen tiempo se meten en Tinder y estas redes y me gustaría contar todo lo que sucede y todos los encuentros más raros que te puedas imaginar que se producen pero con el inevitablemente deseo de enamorarse que no forma parte de la vida virtual sino de la personas. Lo que es fácil en una relación en un chat, es complicado en la vida real.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...