Especial
El ‘Unplugged in New York’ de Nirvana, símbolo de toda una generación, cumple 25 años
A finales de 1993, tan solo cinco meses antes del suicidio de Kurt Cobain, MTV emitió el icónico concierto
Kurt Cobain se suicidó en abril de 1994, pero toda una generación sintió que había asistido a su funeral varios meses antes. Fue en diciembre del año anterior, cuando MTV emitió el concierto que Nirvana había grabado para la cadena. Una auténtica ceremonia en la que el cantante de la banda pidió que se adornase el set con velas negras, un gran candelabro de cristal y lirios. Según su productor, Alex Coletti, se parecía demasiado a un funeral.
Quizá por este motivo la MTV emitió en bucle esta actuación en vivo después del suicidio de Cobain, como una especia de plegaria conjunta que traspasaba la televisión y por la que todos los fans del grunge podrían llorar sintiéndose solo uno.
El MTV Unplugged de Nirvana ya presentaba problemas desde su enunciado. Una de las bandas más emblemáticas del grunge no podía dejarse seducir por la cadena de música más generalista y comercial del mundo, y eso lo sabían. Por ello, pusieron una serie de condiciones a cambio. Por contrato, impusieron que no sonarían hits ni canciones de su último disco, In Utero. Además, establecieron la norma de que no invitarían a ninguna estrella del momento. Por supuesto, ningún directivo se atrevió a pedir una versión acústica de Smells Like Teen Spirit, y Nirvana optó por hacer versiones de versiones de David Bowie, The Vaselines, Lead Belly y los desconocidos The Meat Puppets. Como decía le preguntaron al bajista Krist Novoselic por qué aceptaron, dijo: “Para mostrar nuestro lado más suave, como el papel higiénico perfumado”.
El concierto pronto se convirtió en una nueva forma de entender la música de una de las bandas más emblemáticas del grunge, en un entorno acústico y sin quererlo, se convirtió en una de las últimas presentaciones de Kurt Cobain. La actuación, grabada un año antes de su lanzamiento, logró un nivel de adoración sin precedentes para una actuación de MTV Unplugged. Y eso que algunos de sus antecesores son The Cure, Pearl Jam y Mariah Carey.
El álbum consiguió llegar al número 1 de ventas en España, además de en gran Bretaña, Estados Unidos, Francia o Canadá, y supuso que dos de sus canciones llegaran a coronar la lista de LOS40: About A Girl y la versión de The man who sold the world de David Bowie.
Desde esa escenografía funeraria hasta el repertorio poco conocido que eligieron, este Unplugged se ha consolidado como una de las grandes presentaciones en vivo de la banda. Nirvana saldría de su zona de comfort y eso podía ser un éxito o un rotundo fracaso. Más allá de los resultados, lo que no sabía Kurt Cobain es que se convertiría en todo un símbolo, donde cada canción era un ejercicio de honestidad con su grupo y con el público.
El disco que contiene este concierto ha sido nombrado por la revista Rolling Stone como uno de los 10 mejores álbumes en vivo de todos los tiempos. Ahora, Unplugged in New York será reeditado en doble vinilo de 180 gramos y digital para celebrar el 25º aniversario de su lanzamiento en 1994 con varios contenidos extra. Esta joya para fans de Nirvana podrá conseguirse a partir del 1 de noviembre.
Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic