Batman y La Sombra vuelve a compartir viñetas

No se llevan nada bien. El justiciero de Gotham por todos conocido vuelve a compartir tebeo con La Sombra, menos conocido en nuestro país pero también solitario, de pocos amigos y métodos cuestionables.

La Sombra es un justiciero misterioso con poderes mentales que tapa su cara con una bufanda roja y un sombrero de ala ancha; ataca siempre desde la sombra y anuncia su llegada con una risa para que los delincuentes puedan oírle llegar.

No es la primera vez que comparten cómic. El año pasado tuvieron sus páginas juntos en seis números escritos por Scott Snyder en un guión que enfrentó a ambos personajes contra Joker conformando un tomo que ya se convertido en clásico para muchos al que ECC Ediciones hizo hueco en nuestro país.

Este segundo tomo vuelve a juntar a los héroes, pero Batman viene con premio, y es que Steve Orlando (guionista) recupera la dinámica imposible padre-hijo/Batman-Robin que dejó Grant Morrison a su salida.

Este Robin, Damian Wayne, es hijo de Bruce Wayne y Thalia ‘Al Gul (hija de Ras ‘Al Gul, uno de los más poderosos villanos conocidos) y, si bien comparte la lucha contra el crimen con su padre, la relación no es nada fácil entre ellos.

Este tomo empieza con un ataque del Profesor Pyg en la nochevieja de Nueva York, en lo que dice es un ataque organizado por “los siete silientes”, lo que parece una organización criminal desconocida que, por supuesto, esconderá alguna cara conocida.

En cualquier caso, la historia tiene lugar fuera de la continuidad “canónica” de ambos personajes, por lo tanto “ancha es castilla” a la hora de incluir personajes.

Con un guión interesante de Steve Orlando (segundo guionista del anterior volumen) y el dibujo suficiente de Giovanni Timpano, que ni brilla en exceso ni pesa en la lectura; este segundo volumen de La Sombra y Batman es un encuentro interesante entre ambos personajes y compra para todos aquellos que siguen a Batman de cerca.

El resto, los que compren los tomos “de vez en cuando”, encontrará historias más importantes y mejores compras en las bibliotecas “esenciales” del personaje.