La fama casi destruye a Al Pacino: “Fui a terapia durante 25 años”

El actor de 'El Padrino' y 'El irlandés' sufrió varios episodios depresivos y de ansiedad

El actor Al Pacino acude a la presentación de la película 'El Irlandés' en Londres (Reino Unido) / Gareth Cattermole (Getty Images para BFI)

Es uno de los actores más famosos y prestigiosos de la historia del cine y ha participado en algunas de las mejores obras de todos los tiempos. Michael Corleone en El Padrino, Sonny en Tarde de Perros o el policía Serpico en la película que lleva su nombre son algunos de los ejemplos con los que Al Pacino se dio a conocer durante su juventud. Una fama arrolladora que casi se lo lleva por delante, como confiesa en una entrevista a The Hollywood Reporter.

"Fui a terapia cinco veces a la semana durante 25 años", explica Pacino. Después del éxito de sus primeras películas, el actor se convirtió en una estrella. Todo el mundo lo conocía. No podía caminar si que la gente le pudiese autógrafos. Galas, festivales, ruedas de prensa, fans. Abrumado y ansioso, decidió bajar el ritmo. De ser la estrella en nueve películas en los años 70 pasó a protagonizar solo cinco en la década siguiente, entre ellas la polémica y censurada A la Caza y el icono de las cintas de narcotraficantes: El precio del poder. "Necesitaba distanciarme", dice el actor... "Pero el dinero se acababa".

Tras una carrera intensa que le ha reportado tan solo un Óscar por su deslumbrante interpretación del teniente coronel ciego Frank Slade en Esencia de Mujer (inolvidable aquella mítica secuencia del baile del tango con Por una cabeza de fondo), Pacino sigue en activo, pero es raro verlo en papeles protagonistas de calidad. Ahora parece haber recuperado trayectoria tras pasar brevemente por la comedia negra de Quentin Tarantino Érase una vez en... Hollywood y tras encarnar a Jimmy Hoffa en El irlandés, con Martin Scorsese.

Aquel joven mafioso taciturno al que supo exprimir Francis Ford Coppola en la trilogía de El Padrino confiesa estar recuperado, aunque siempre tuvo miedo de acabar con problemas de depresión, ansiedad y drogas como tantos otros compañeros de industria. Así lo confesó hace cinco años en una entrevista en The Independent, donde dijo que una depresión puede ser "arrolladora" y que tiene "suerte" de no haber padecido un sufrimiento demasiado intenso en sus peores momentos. "He tenido altibajos, pero nunca con tanta intensidad", explica.

Dice que sus tres hijos son la luz de su vida y que ahora él es feliz. Y, a sus 79 años, con la serie de televisión Hunters y las películas Axis Sally y El rey Lear de por medio, eso es todo lo que importa.