Qué ha sido de Jack Gleeson, el actor que interpretó a Joffrey en ‘Juego de Tronos’
Ha desaparecido del radar mediático
La fama atormentó a varios miembros del reparto de Juego de Tronos. Sophie Turner (Sansa) padeció una fuerte depresión. Kit Harington (Jon) acabó alcoholizado y en un centro de rehabilitación. Maisie Williams (Arya) también tuvo problemas con la bebida, aunque confiesa haberlo dejado definitivamente. Lena Headey (Cersei) tiene un trastorno de ansiedad crónica. El éxito no siempre trae consigo buenas experiencias y algunos actores, como Jack Gleeson (Joffrey), han decidido apartarse del radar mediático por su salud física y mental.
El actor que interpretó al malvado rey de los Siete Reinos durante las cuatro primeras temporadas (hasta aquella trágicamente satisfactoria Boda Púrpura) decidió abandonar los focos y no participar en más películas.
Ya sabemos cómo es esto: "no volveré nunca más", dijeron Quentin Tarantino y Daniel Day-Lewis. Y ahí han seguido con su ultimísima última vez, postergando algo que parece inviable dado su talento.
Lo cierto es que Gleeson se ha mantenido fiel a su palabra: la última vez que lo vimos en televisión fue en 2014 en Juego de Tronos. En cine fue en 2010 con la película All Good Children, cinco años después de aquel famoso cameo en Batman Begins con tan solo doce años. Nada más. Cero. Ni colaboraciones, cameos u otro tipo de apariciones espontáneas.
¿Qué hace, entonces, el tiránico Baratheon? Actualmente estudia Filosofía en el Trinity College de Dublín, Irlanda, cerca de su ciudad natal, Cork. También participa en eventos relacionados con el cine, como las ComicCon o la FreakCon, en las que se saca un sobresueldo bastante sustancioso, ofrece algún que otro discurso y, eso sí, no concede entrevistas.
De vez en cuando se le ha podido ver en las premieres de Juego de Tronos o en el excéntrico Trinity Brawl 2 de Dublín, un espectáculo de lucha libre en el que irrumpió para apoyar a uno de los dos 'wrestlers' de la noche, y donde recibió un aluvión de aplausos y abucheos (en broma, se presupone) tras su intervención, no sin las bromas típicas de los fans de la saga fantástica de HBO.
Según explicó en una entrevista con The Independent, no está interesado en la fama y le incomoda que todo el mundo lo reconozca por la calle. Confiesa que incluso llegaron a insultarlo por interpretar a un personaje tan odiado. La idiocia humana, lamentablemente, no tiene límites, y eso fue lo que minó la carrera del actor.
En cualquier caso, Gleeson dice estar feliz, prefiere estar rodeado de sus seres queridos y participar en pequeñas obras de teatro locales, todo lejos de las cámaras y el peligroso engranaje mediático al que sí se han expuesto sus compañeros de reparto. Hasta nuevo aviso, no lo veremosen más proyectos.