Billie Eilish, Miley Cyrus... Las lágrimas más vistas de la música
A Rihanna, James Blunt o Selena Gomez también se les cayó la lágrimilla
Difícilmente encontraremos algo que remueva más nuestros sentimientos que la música. Capaz de hacernos reír y/o llorar. Los propios artistas nos han dado decenas de ejemplos en vídeos musicales de que una lágrima a tiempo es reparadora.
Billie Eilish, Miley Cyrus o Selena Gomez son algunas de las solistas a las que se les cayó una lagrimilla delante de las cámaras para el rodaje de su videoclip. Y si pensáis que llorar ante el público es solo cosa de mujeres no podéis estar más equivocados. James Blunt o Kanye West son algunos ejemplos.
Miley Cyrus - Wrecking Ball
La canción fue compuesta por Maureen McDonald, Stephan Moccio, Sacha Skarbek, Lukasz Gottwald y Henry Walter. Se trata de una balada pop cuya letra hace referencia a esa horrible sensación que se tiene tras haber roto con tu pareja. El vídeo de Wrecking ball, que ya forma parte de la historia del pop, fue dirigido por Terry Richardson, quien ya gozaba de popularidad por haber trabajado con estrellas de la talla de Lady Gaga y Beyoncé.
Selena Gomez - The heart wants what it wants
Son muchos los que utilizaron sus sentimientos tras una pelea o ruptura para crear un exitazo, y de paso, dar donde más le duele a un ex. Selena Gómez, tras varias idas y venidas de la cantante con Justin Bieber, no pudo evitarlo y lanzó The Heart Wants What It Wants, una canción con más de 600 millones de reproducciones y en la que comienza, entre lágrimas, diciendo frases como "me hiciste creer que estaba loca y que la culpa era mía". Video producido por Rock Mafia y dirigido por Dawn Shadforth.
Billie Eilish - When the party's over
Lágrimas negras (y no precisamente las de Bebo Valdés) descubrimos en esta arriesgada propuesta musical y audiovisual con la que comenzamos a conocer a una de las artistas revelación de los últimos años. When the party's over, co escrito y producido por su hermano Finneas, estuvo sobre la mesa de ambos hermanos durante más de tres meses hasta que finalmente dieron con la tecla. Y aunque pueda parecer otra cosa (Todavía no sabes demasiado, solo te dañaré si me dejas, llámame amiga pero mantenme cerca, Y te llamaré cuando termine la fiesta), la historia es tan sencilla como esa pelea de pareja en la que uno intenta llamar al otro que está en una fiesta. Fácil, ¿no? Lo de echar líquido negro por los ojos no lo fue tanto.
James Blunt - Monsters
Como os decía, la prueba de que llorar delante de la cámara poco o nada tiene que ver con el género. No siempre las lágrimas se derraman por una relación de pareja. Los vínculos de familia son tan poderosos como cualquier relación sentimental. James Blunt nos acaba de dar la prueba de todo ello con su vídeo Monsters. Un primerísimo plano en el que derrama las lágrimas por la enfermedad de riñón de su padre con la que está batallando en los últimos años.
Juan Ignacio Herrero
Redactor de LOS40 desde 2005