Pamela Anderson se divorcia de su marido tras 12 días de matrimonio

Sabemos que algunas personas no están hechas para el matrimonio, pero casarte y arrepentirte unos años después es una cosa y que no tardes ni dos semanas en pedir el divorcio es otra muy diferente. Es lo que les ha pasado a la actriz Pamela Anderson y al exitoso productor Jon Peters.

La pareja había mantenido un noviazgo durante su etapa de juventud, hace casi treinta años. Él, al parecer, quedó locamente enamorado de la actriz de Los vigilantes de la playa y Barb Wire. Tanto que durante décadas no pudo olvidarla, según confesó a The Hollywood Reporter.

Hace unos meses Pamela y Peters se reencontraron, recuperaron aquella chispa y decidieron que era buena idea casarse. Aunque nunca es tarde para conocer a tu media naranja, tener más de cincuenta años (en el caso de Anderson) y setenta (Peters tiene 74) hace que muchos teman perder el tren, así que se lanzaron de lleno.

Craso error, porque el matrimonio les duró menos que a Ruth Fisher y George Sibley en A dos metros bajo tierra: doce días. "Tenemos que reevaluar lo que queremos para nuestra vida y lo que esperamos el uno del otro", emitía la pareja en un comunicado, antesala de un divorcio premeditado.

¿Qué ha pasado para que todo se precipite tanto? ¿Algún secreto inconfesable? Era la quinta boda de Pamela Anderson y será, previsiblemente, su quinto divorcio. De Peters será el segundo, después de que en 1974 se divorciase de Lesley Ann Warren. Una breve, brevísima, fugaz y delirante historia de amor que duró poco menos de dos semanas.