Carlos Sobera ha vuelto a emocionarse contando aquella vez que estuvo a punto de morir

Pudo ser actor, abogado o incluso cura, pero finalmente, Carlos Sobera se convirtió en uno de los rostros imprescindibles de nuestra televisión. Ahora podemos verle haciendo doblete en First Dates, donde actúa como maestro de ceremonias de posibles futuras parejas y en Tierra de nadie, uno de los programas del universo Supervivientes.

No es la primera vez que lo cuenta, pero se ha sentado en el sillón de Uppers para recordar, y volver a emocionarse, con aquella ocasión en la que estuvo a punto de morir. “Me tocó una fístula y casi me lleva al otro barrio. A mi mujer es a la que dicen ‘oye, que le vamos a subir al quirófano pero no sabemos si va a salir de esta, en fin, que se puede morir en 24 horas, estoy hay que vigilarlo”.

Afortunadamente todo salió bien y ahora puede contarlo. Pero no fue el único susto que vivió el año pasado. Su mujer también tuvo un percance de salud que asustó al presentador. Estaba grabando First Dates cuando le llamaron para decirle que Patricia había tenido un mareo.

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“Cuando llegué al hospital me dijeron que había tenido un pequeño derrame y que estaban mirándola. Fui a la habitación y cuando me la encontré semi inconsciente… me pegó un bajonazo tremendo. Se pasa mal”, recordó muy emocionado y lágrimas en los ojos. “Me pegó otro bajonazo, fíjate, lo pienso ahora y me pega bajón, es que es muy joven, cuando la vi así en el hospital, me acojoné muchísimo”.

Carlos y Patricia llevan 15 años juntos. “La primera frase que yo pensé de ella fue ‘osti, tú, esta mujer me va a complicar la vida’”, recuerda, “me enamoré de ella a primera vista y después me fui enamorando más de ella hasta las patas y aquí estamos”. Y es evidentemente que sigue enamorado de ella como al principio: “Cuando la conocí cumplí todos mis sueños”, aseguró durante la entrevista.

Ahora, después de lo ocurrido los dos tienen muy claro que lo suyo es apostar por el ‘carpe diem’, vivir el presente por lo que pueda pasar: “La vida se va en un instante, es como el éxito televisivo, igual de fugaz”.