Los álbumes de cromos, la adicción de nuestra infancia

Si hay algo que nos gustaba de pequeños era intercambiar cromos en el patio del colegio. Repasamos las mejores colecciones

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Como si estuviéramos en el recreo, recordamos una de nuestras aficiones más 'classic'. Intercambiar cromos y rellenar los álbumes era una verdadera adicción. Buscar ese cromo que nunca salía, cambiar aquellos que se repetían hasta la saciedad... 

¿Recuerdas cuáles son esas colecciones de cromos que tienes completas? Con Eduardo Aldán descubrimos en Morning Box los más famosos de toda una época.

No es muy habitual encontrar ahora colecciones de cromos, pero hubo un tiempo en el que podíamos encontrarlos en nuestro kiosco más cercano, y de todos los tipos. De fútbol, de todo tipo de series de televisión, de películas... Todos los jóvenes de los 80 y 90 podían coleccionar e intercambiarse los cromos de sus hobbies favoritos.

En la era digital, ahora es difícil cruzarse con este tipo de objetos. Muchos de ellos son verdaderos objetos de coleccionista y se pueden encontrar en páginas web y aplicaciones de segunda mano. Algunos de ellos son tan valiosos que se venden por importantes cantidades de dinero. 

Seguro que si buscas en tu casa, puedes encontrar varios álbumes de cromos completos, o casi completos, porque algunos de ellos eran de lo más complicado de conseguir. Con un poco de maña y capacidad de negociar, íbamos ampliando nuestra colección con los intercambios que hacíamos con los amigos o comprando sobres en los kioscos, sobre todo teniendo suerte de que no nos tocaran los que ya teníamos.

Ya sabes que nosotros tenemos espíritu classic, y por eso consideramos que los cromos tienen sentido y valor en un sentido físico. No existe, hoy por hoy, una alternativa similar en el mundo virtual, nada que pueda sustituir a ese nerviosismo que teníamos los niños de una generación por abrir un sobre o ver, con emoción, cómo se va completando ese álbum en el que tanto esfuerzo ponemos para llenarlo. ¡Larga vida a los cormos!