'Embrujada', el himno de Tino Casal que definió la Movida
Fue el primer gran éxito del artista que recogió la tencencia del 'new romantic' en los inspiradores años 80
Su carrera fue corta, truncada por un accidente de tráfico que acabó con su vida a los 41 años, pero a Tino Casal le dio tiempo a demostrar que fue uno de los artistas multidisciplinares y compositores más innovadores de su época. En plenos años 80 españoles, como parte clave de la Movida madrileña, el asturiano desarrolló una carrera musical inscrita en el techno y el n'ew romantic' que llegaban de fuera de nuestras fronteras, principalmente de Reino Unido.
Siempre barroco al vestir, con una estética que le convertía en el rey del glam, Tino Casal arrancó su carrera en solitario en 1981 con su primer disco Neocasal, en un país inmerso en un tiempo de apertura musical sin precedentes, de ganas burbujeantes de innovar. A pesar de que el trabajo, producido por su amigo Julián Ruiz, no contó con el visto bueno de la crítica, comenzó a cosechar seguidores.
Con el cambio de década, Tino Casal se ganó el sobrenombre de Rey de la modernidad dos años más tarde, en 1983, cuando publicó Etiqueta negra. De este álbum se desprendería Embrujada, una canción que supuso un punto de inflexión en su carrera.
En cuanto tocó las tiendas de discos, se catapultó hasta lo más alto de las listas de ventas, y llegó al número 1 de la lista de LOS40 el 9 de abril de 1983. También consiguió el disco de oro, que entonces premiaba la venta de 50.000 copias de vinilo.
Tanto es así que el artista decide reeditarlo con nuevos temas y grabar una versión en inglés que no salió del todo como esperaban. Así lo recuerda Julián Ruiz en Cadena SER: "Siempre nos quedó la espina de que cuando hicimos Embrujada la compañía EMI en Inglaterra estaba convencida de que podía ser un número uno mundial. Nos pagó un viaje, fuimos allí, yo elegí al productor de Sting y de Phil Collins, y grabamos una versión en inglés de la canción pero el inglés de Tino nunca fue bueno".
Casal se inspiró en la noche madrileña para escribir su éxito. Hombres y mujeres de todo tipo, ataviados de mil maneras, con sustancias para embriagarse hasta altas horas de la madrugada. Así compuso una letra que plasma a la perfección todo lo que ocrurría en aquel ambiente de libertinaje sin prejuicios de la primera mitad de los años ochenta.
El videoclip, a medio camino entre ese aire doméstico pero a la vez innovador, ayudó mucho a la promoción de este tema. Sin embargo, fue el boca a boca el que realmente consiguió que Embrujada se convirtiera en todo un hit que sonó en todas las fiestas y locales del momento.
A partir de entonces, el artista publicaría varios trabajos más convertidos en éxitos, como Etiqueta Negra o Hielo Rojo. En medio de esta producción, en 1985, Casal sufrió un accidente de moto por el que tuvo un esguince. Al no tratarse como debería, es hospitalizado y permanece lejos de los escenarios durante un año y medio. Sin embargo, ayudado por un bastón, vuelve a la música en 1987, cuando publica Lágrimas de cocodrilo, es el disco más vendido en España en ese año tras el Descanso dominical de Mecano.
Tino Casal murió el 22 de septiembre de 1991 en un accidente de coche. Quizá con el tiempo se podría decir que la propia vida que reflejó en Embrujada era la suya. Prisas, nerviosismo, ganas de comerse el mundo y ambición que acabaron con su vida demasiado temprano.
Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic