Can Yaman avanza en su aprendizaje de español y La Vecina Rubia se propone ayudarle

Gracias al éxito de las telenovelas turcas, sobre todo a Pájaro Soñador, Can Yaman se ha convertido en toda una celebridad en nuestro país. Su melena al viento, su metro noventa de estatura y su barba poblada se han convertido en todo un referente en España (aunque por motivos de guion ha tenido que prescindir de ellos de momento). De hecho, su visita a nuestro país hace unos meses se convirtió en todo un fenómeno. Viendo el filón que tiene el turco en nuestro país, no nos extraña que haya decidido aprender español. Quién sabe si dentro de unos meses comienza a aparecer en las series españolas.

Pues bien, parece que, en estos días de confinamiento, Can Yaman le está dando duro al español. Hace unos días enviaba un mensaje de apoyo a nuestro país en Twitter en castellano: “Juntos lo lograréis”.

Ahora, Can Yaman ha compartido un tuit completamente en español que ha revolucionado Twitter el pasado fin de semana: “Sigo estudiando español y ya he empezado a hablarlo un poquito. Ahora puedo entender mucho mejor lo que escribís. Espero aprenderlo mucho más hasta que termine la cuarentena:) Saludos a todas”.

Un gesto que ha sido muy aplaudido en la red social. De hecho, el tuit suma más de dos mil retuits y casi 19 mil me gusta. Además, ha generado miles de comentarios. Hasta la vecina rubia, la famosa tuit star, ha querido contestarle ofreciéndose a darle clases particulares: “Si quieres ayuda, sobre todo con la ortografía, yo estaré encantada de darte clases particulares”.

De hecho, Cepeda, el intéprete de Gentleman, ha contestado a la propuesta de La Vecina Rubia, asegurando que él también quiere. “Entre los tres podemos repasar ortografía, aprender turco y lo que surja”, ha contestado la tuitera.

Can Yaman lleva meses practicando español. Es más, en sus redes sociales lo hemos visto mostrando los libros que usa para aprender y que llevan el nombre de “español fácil”. Y es que estos días de encierro son perfectos para aprender un idioma, ¿no crees?