Angelina Jolie, criticada por la educación de sus hijos: “Parece una comuna hippy”

Angelina Jolie se encuentra confinada en la mansión donde residió el productor Cecil B. DeMille hasta su muerte en 1959 -la cual compró por 23,5M de euros-, junto a sus seis hijos. Maddox, el mayor, se vio obligado a volver a casa desde Corea del Sur, país donde estudia Bioquímica en la Universidad Yonsei, después de que le cancelaran las clases por el coronavirus.

La actriz, que siempre ha sido partidaria del concepto homeschooling (estudiar desde casa) y de impartir una educación no convencional, ha manifestado a la revista Time que tener a los hijos a su alrededor "es una bendición y todo un reto en lo referente a los estudios".

La imagen que proyecta Angelina de sí misma es la de una madre entregada con una familia unida. No obstante, varios han sido los ex asistentes y cuidadores que han renunciado a su trabajo frustrados y agotados ante el caos y la poca disciplina en el hogar de los Jolie-Pitt, la casa donde los niños viven su creatividad y un estilo de vida sin ningún tipo de reglas o estructuras. Algo que muchos empleados han calificado como "una comuna hippy" en varios medios americanos, como la revista People.

Desde que comenzara el largo y duro proceso de divorcio, Brad Pitt ha reclamado que sus hijos se matricularan en el colegio y no estudiaran en casa. Una petición que el juez ha aprobado tras la revisión de varios informes. Parece que su padre es el único que imparte sentido común, ya que se cuenta que en los cumpleaños a los que son invitados corren desenfrenados por casas y jardines.

De acuerdo con fuentes cercanas al actor, la protagonista de Maléfica es una madre maravillosa "cuando las cámaras están cerca" y que, de puertas para adentro, se encierra en su despacho y se abstrae en sus proyectos humanitarios. Esto solo es interrumpido para controlar a las cuidadoras de John, Vivienne, Zahara, Pax y Knox.

De cara a la opinión pública hollywoodiense, todos aman a Brad Pitt mientras que Angelina Jolie se encuentra cada vez más aislada en una guerra por la custodia que aún sigue viva.