Literatura romántica: “Ahora las protagonistas femeninas no necesitan ser rescatadas por príncipes azules”
Analizamos el género más super ventas con dos de sus autores: Anabel García y Daniel de la Peña
La literatura romántica en España ha dado un giro de 180 grados y ha dejado de ser vista como género de segunda. Buena prueba de ello es que muchos de sus títulos están pasando a las pantallas del cine y de las televisiones con gran éxito, como la recién estrenada Valeria, El tiempo entre costuras o Palmeras en la nieve.
No cabe duda de que en la actualidad ya no disfrazan la pasión por este género tanto mujeres como hombres y está dejando de ser considerada como una lectura femenina y para minorías. Las listas de ventas nacionales, lideradas por novelas románticas casi todo el año, así lo acreditan, y las novelas que no están catalogadas como románticas, siempre incluyen alguna fascinante historia de amor.
Dos representantes del género como Anabel García y Daniel de la Peña están convencidos de que están viviendo una etapa dorada con la literatura romántica. Ella es una cacereña residente en Madrid y autora del súper ventas, El día que me calle me salen subtítulos, una comedia romántica de la que lleva cinco ediciones publicadas con Planeta.
Él es un zaragozano y autor de Esta noche mando yo, una de las comedias románticas más vendidas de Selecta (Penguin Random House). Ambos tienen éxito dentro de la romántica, se atreven a auto publicar sus propios libros y son grandes amigos. Y hemos querido charlar con ellos sobre este tipo de literatura cada vez más demandada, de los clichés, los prejuicios y las envidias del género.
¿Consideráis que la literatura romántica es un género poco valorado?
Anabel: Creo que resulta evidente que está denostado y por eso yo cada día lucho contra viento y marea por defender su valía, pues la romántica es el único género literario en el que ya de antemano está establecido el guion y, sin embargo, cada historia te sorprende. Al menos yo me esfuerzo mucho en que cada una de mis novelas tenga una trama muy elaborada y muy distinta a la anterior.
Antes, las protagonistas eran sumisas que se enamoraban del típico macho alfa poderoso que llegaba para deslumbrarlas y salvarlas en su corcel blanco
¿Cómo creéis que ha evolucionado a lo largo de los años?
Daniel: Bastante. Ahora las protagonistas femeninas no necesitan ser rescatadas por príncipes azules ni la trama principal gira en torno a eso. Ahora son más reales, gamberras, divertidas y completas. Y, también, hay protagonistas masculinos o, algo que me chifla, se escucha la voz del chico y de la chica. También, se nota la evolución que los personajes gais son menos clichés y tienen más peso en las historias.
Anabel: La novela rosa de toda la vida, la que leían nuestras madres a escondidas de nuestras abuelas, y la que leía yo desde los trece años, era muy distinta a las novelas de hoy en día. Antes, las protagonistas eran sumisas que se enamoraban del típico macho alfa poderoso que llegaba para deslumbrarlas y salvarlas en su corcel blanco, entre otras cosas, porque las mujeres no eran independientes económicamente. Hoy en día es otro cantar, las mujeres han evolucionado muchísimo en la sociedad y eso se traslada a la literatura. Ellas deciden cómo, cuándo y dónde; no necesitan a un hombre para sentirse realizadas, ellas eligen si quieren o no tener pareja, sexo esporádico o, simplemente prefieren estar solas. Además, en la actualidad se fusionan muchos subgéneros dentro del romántico y eso me fascina, da mucho juego.
¿Hay machismo en este tipo de historias?
Daniel: Sí. Desde los trabajos que desempeñan las mujeres como secretaria o en limpieza, que no digo que no sean puestos dignos, pero choca mucho frente a los puestazos que tienen los protas masculinos; jefes, empresarios, millonarios o ejecutivos. Por suerte, cada vez hay menos machismo. Mis protagonistas femeninas son escritoras, community manager, tatuadoras o empresarias. Y lo que más me gusta, es que no necesitan ser rescatadas por nadie.
Todavía cargamos con esa humillante creencia de que la romántica es por y para mujeres
¿Es un género por y para mujeres?
Anabel: Lo último que me dijo un ‘señor’ y lo pongo entrecomillado porque no se podría llamar señor a aquel energúmeno es que: ‘esta mierda es de tontas para tontas’. Por lo tanto, creo que todavía cargamos con esa humillante creencia de que la romántica es por y para mujeres. Yo, por el contrario, creo que hay grandes escritores de romántica, como mi gran compañero y amigo Daniel de la Peña. Y a la hora de los lectores, es cierto que en su mayoría son mujeres, no sabría si aventurarme a asegurar que los hombres que nos leen se esconden para no ser juzgados por otros, todavía son una minoría los que se sienten orgullosos de leer romántica y espero que esto cambie algún día.
Daniel: En absoluto. Sí que es verdad que me leen más mujeres, pero también muchos hombres. También conozco a más escritoras de romántica que son buenísimas, aunque hay chicos que lo hacen de maravilla como José de la Rosa.
Anabel, ¿te esperabas el éxito de tu novela El día que me calle me salen subtítulos?
Anabel: Voy a ser clara y concisa: ¡Ni en mis mejores sueños! No tengo palabras para agradecer a mis lectores tal éxito. La historia trata sobre una mujer de la aristocracia de Los Ángeles que se enamora perdidamente de un gañán de los suburbios. La moraleja es que alguien que no tiene nada puede salvar a alguien que lo tiene todo.
Daniel, ¿por qué crees que Esta noche mando yo ha gustado tanto?
Daniel: Creo que es una historia muy divertida que habla de mujeres contemporáneas que rompen barreras y se ayudan entre ellas. La trama engancha; Ana es la protagonista, una noche de fiesta con sus amigas se le acerca una adivina y le dice que esa noche le pasarán tres cosas y una de ellas es que ¡conocerá al amor de su vida! Después, todo es una locura. Creo que el éxito es la agilidad y lo original que es la obra.
¿Qué relevancia tiene la música en vuestras novelas?
Anabel: En mis historias la música es fundamental, no sería lo mismo si en cada escena no hubiese una canción especial que la acompañase, ambientase y acariciase. ¡Además, muchos de mis personajes son oyentes de LOS40!
Daniel: Mucha. En mis libros siempre pongo música que escucho en LOS40, como Aitana, Selena Gomez, Jennifer López o Dua Lipa… ¡Es imprescindible!
Además de publicar con grandes editoriales como Planeta o Penguin Random House, ambos habéis autopublicado otras novelas en Amazon, ¿cómo vivís esta aventura?
Daniel: Con nervios e ilusión. Acabo de autopublicar en Amazon Cena de amigas. Es una comedia romántica con suspense y el proceso está siendo muy estimulante. Haces todo; desde el diseño de portadas, maquetación, pasas el manuscrito a amigos y gente que sabe de literatura para que lo corrijan y el resultado sea el mejor. Por ahora, estoy muy contento. La novela gusta y eso es una pasada.
Anabel: Para mí la autopublicación es algo que necesito tanto como respirar. Es un subidón de adrenalina que me pone mucho. Me encanta publicar con la editorial porque te permite estar en las librerías, ferias del libro, eventos, etc. Pero la única condición que puse a la hora de firmar con ellos fue que me permitieran publicar también por mi cuenta, aun a riesgo de que se negasen a ello, pero aceptaron. Autopublicar me hace sentir libre y viva, no sé, es una experiencia distinta. Por lo tanto, en marzo salen mis novelas con Planeta y en verano las autopublicadas.
¿Qué clichés odiáis en la comedia romántica?
Daniel: Los que siempre se repiten y no aportan nada. Como la ex celosa y mala, o la damisela en apuros… a veces los meto en mis novelas, pero o les doy poca importancia o les doy la vuelta para sorprender al lector.
¿Y cuál es imprescindible?
Anabel: Para mí un cliché fundamental es el final feliz. Da igual lo que sufran a lo largo de la historia, pero el final debe ser feliz, siempre. Lo siento, soy una defensora a ultranza del amor, tanto a la hora de ponerme en el papel de lectora como de escritora.
Hay mucha envidia y de la mala
¿Hay envidias en el mundo de la literatura?
Anabel: Ay, Dani, no sé si tú vas a pringarte en responder esta pregunta, podríamos abrir un buen melón, pero yo voy a contar un secreto: Hay mucha envidia y de la mala, pero también hay gente maravillosa que se convierte en tu familia. Así que, a las envidiosas, ¡que les den!
Daniel: Pues antes pensaba que no, pero después de un tiempo estoy convencido de que sí. Yo prefiero alegrarme de los éxitos de los demás y centrarme en hacer bien mi labor; en emocionar al lector y que mis libros sean atractivos. Pero te das cuenta de que mucha gente que ayudas solo te quiere por el interés o que no se alegran de tus logros. También hay gente increíble y eso es lo mejor.
¿Qué importancia tienen las redes sociales en la vida de un escritor?
Daniel: Muchísima. Las redes en la forma más directa de estar en contacto con nuestros lectores, de informarles con primicias que les chiflan de nuestros trabajos y de que nos cuenten cómo están y lo que les ha hecho sentir nuestros libros.
Anabel: Para mí, personalmente, las redes son algo imprescindible en mi vida. Gracias a las redes llegamos a gente a la que antes era impensable llegar y, además, hablas cada día con todos tus lectores/amigos, mantienes ese contacto que es lo que me da alas para seguir volando. Cada vez que alguien me dice por redes esas cosas tan bonitas sobre mis libros es mágico.
¿La comedia da pie a ser políticamente incorrectos?
Anabel: La comedia da pie a ser lo que tú quieras y a decir lo que te dé la gana sin que nadie se moleste, pues entre bromita y bromita se asoma la patita (risas). A mí el humor me sale solo porque en mi vida diaria soy peor que Bridget Jones, me pasan cosas surrealistas continuamente, y no me queda más remedio que reírme de mí misma. Creo que el sentido del humor es fundamental en la vida y mucho más en los libros. Además, hacer de reír a la gente no es nada fácil si no te sale de manera natural, es muy complicado y mis lectores me dicen que mis novelas consiguen que tengas que dejar de leer para reírte, por lo tanto, me siento muy orgullosa por alegrarle el día a alguien.
Daniel: Sin lugar a dudas. Con la comedia puedes hacer crítica social o ser más incorrecto y que suene bien. Me encanta escribir comedia por la libertad que te da el género.
¿Qué estáis tramando ahora?
Daniel: Pues acabo de auto publicar Cena de Amigas en Amazon y en unas semanas auto publicaré un libro precioso donde entrevisto a los escritores de romántica más destacados contando sus trucos, secretos y pasiones como Megan Maxwell, Blue Jeans, Anabel García, Alice Kellen, Lorena Franco o José de la Rosa… En junio publico Menos peros y más te quieros con Selecta. Y en agosto Quiero Volver (Selecta) que es una preciosa y divertida historia de amor de balcón a balcón.
Anabel: Estoy dando las últimas pinceladas a mi nueva novela: Tacones y Mazmorras (comparto el título y la portada en primicia porque todavía no lo sabe nadie), que verá la luz en Julio. Trata de tres amigas, a cada cual más chiflada/ borderline, que deciden un buen día volverse a juntar después de muchos años sin verse para salir de fiesta. Acuden a una subasta benéfica que organiza el jefe de una de ellas porque hay copas gratis, pero confunden la subasta con el precio justo y ¡les termina tocando un castillo medieval en medio del bosque! Una locura desternillante porque deben reunir todos los millones que cuesta el castillo en menos de tres meses si no quieren ir a la cárcel. Y en marzo de 2021 saldrá la nueva novela de Planeta que también promete ser una locura. Espero que os guste.