El espantoso primer diseño del Baby Yoda nos habría provocado pesadillas

Antes de convertirse en el entrañable alienígena que todos conocemos, el personaje iba a ser un engendro difícil de mirar

Imagen del Baby Yoda en una escena de 'The Mandalorian' / Fotograma promocional (Disney+)

La serie documental Disney Gallery Star Wars: The Mandalorian ha revelado cómo fueron los inquietantes primeros diseños del Baby Yoda, el personaje más entrañable y querido de la nueva serie del universo Star Wars de Disney+.

En una entrevista el director Jon Favreau reveló que costó bastante encontrar el boceto del Baby Yoda perfecto. Vieron numerosos diseños de arte pero ninguno acabó de encajarles. O eran demasiado feos o demasiado horripilantes. Otros no guardaban unas proporciones realistas o eran difíciles de transformar en un bebé del espacio.

Algunos de esos bocetos se enseñan en el Disney Gallery de Star Wars y, honestamente, damos las gracias de que no los hayan utilizado, porque dan bastante mal rollo. Un Baby Yoda regordete y algo peludo, con la piel completamente arrugada, podría haberse convertido en el ser más feo de toda la galaxia.

Otro de los diseños muestra a un Yoda más pequeño, a dos patas, que tiene una cara de conejo, con las orejas largas. En otro artwork paralelo aparece con las orejas recogidas hacia atrás, como un animalito salvaje, algo que no se parece en nada al maestro Yoda de George Lucas. Por no hablar de otro diseño en el que tiene cabeza de huevo.

Finalmente los creativos se decidieron por la propuesta de Chris Alzmann, quien presentó un boceto con el Baby Yoda enfrascado en una chaqueta de combate, con los ojos "un poco raros", según confiesa el cineasta, pero que finalmente fue transformado en el entrañable ser que hoy todos conocemos por The Mandalorian.

Damos gracias a Alzmann por habernos evitado las pesadillas.