Cómo triunfar en la industria musical y no morir en el intento

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Perseverancia. Es la palabra que mejor define a Maggie, la protagonista de Personal Assistant a la que encarna una fabulosa y empática Dakota Johnson (50 Sombras de Grey, Suspiria). Hablamos de un personaje que persigue un sueño ambicioso: convertirse en productora musical en un mundillo en el que los pesos pesados de las discográficas y los managers suelen ser hombres. La clave de ese proceso de autorrealización y ruptura del sistema establecido es el leit motiv de la cinta: no dejarse amedrentar por las negativas ni los obstáculos y guiarse por el corazón para poder conseguir nuestros objetivos, por muy difíciles que estos parezcan.

Quizás Personal Assistant peque de ingenuidad, de ser algo complaciente y muy light (hablamos de una producción destinada a la masa), pero su mensaje, a pesar de estar edulcorado, es igual de fuerte y poderoso que cuando lo leemos en un manual de autoayuda o en una sesión de misticismo zen: cree en ti mismo/a y podrás conseguir lo que te propongas.

Si acaso hay algo que reprocharle es un guion endeble. La historia es lineal y previsible (salvo por ese giro de trama final, que además es algo bobalicón y destruye la coherencia interna de la película) y está destinada al puro entretenimiento. El retrato del mundo de la producción discográfica es bastante ingenuo y está idealizado y no profundiza en un tema muy interesante que tenía en bandeja: el machismo del mundo del espectáculo. Solo pasa por encima de ello.

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Aunque seamos sinceros: queremos desconectar de la rutina, del dichoso coronavirus, de la política frentista y volver a sentir la magia del cine. Personal Assistant nos regala una historia de esperanza liderada por una persona entrañable y llena de talento y vitalidad, a la que da vida una más que competente y talentosa actriz.

Nisha Ganatra y Flora Greeson, directora y guionista, saben cómo cautivarnos con personajes carismáticos, diálogos divertidos, una relación de amistad interracial y un romance desarrollado entre estudios de grabación musicales y mansiones de lujo. La película funciona a pesar de la artificiosidad del guion y el torpe giro de trama final, y tiene un buen reparto y una factura técnica y musical impecable en la que no faltan clásicos de Sam Cooke, Aretha Franklin y Marvin Gaye. Se disfruta. Y en estos tiempos que corren eso ya es un logro.

Personal Assistant se estrena en cines el viernes 26 de junio de 2020.